Garitano continúa probando en defensa para encontrar el sistema adecuado

El castillo que pretendía crear Gaizka Garitano en la defensa del Real Valladolid ni siquiera se ha empezado a construir. La idea del entrenador desde su llegada era hacer un fuerte atrás y, partir de ahí, que el equipo creciera. Pero, tras ocho jornadas no ha sido así. En cambio, ese pensamiento sí que se hizo realidad en pretemporada. Ahora, el Pucela es el sexto que más goles ha encajado en la Liga Adelante –diez–. Por ello, el técnico blanquivioleta sigue buscando la tecla para cambiar esta situación.
Esa solidez defensiva no ha hecho acto de presencia. Al Real Valladolid le cuesta generar peligro en el área rival y, sobre todo, acertar con la pelotita. Además, cuando es al contrario, cuando le toca despejar las acometidas de los rivales, quienes encuentran facilidades para crear oportunidades, sufre. El equipo no se muestra contundente atrás y el de Derio tiene un problema. Solo ha dejado su portería a cero en tres ocasiones hasta el momento –Alcorcón, Bilbao Athletic y Nàstic–.
Garitano ha probado todas las combinaciones con los tres centrales que tiene la plantilla y ninguna parece convencerle. De hecho, ha preferido retrasar a Timor, a quien se le han notado en demasía las carencias en el eje de la zaga. Esta decisión la pagó Juanpe ante el Real Oviedo, puesto que vio el choque desde la grada. Samuel también salió perjudicado, pero aportó desde el banquillo. Su entrada en el segundo tiempo hizo que el conjunto blanquivioleta jugara con una defensa de tres.
El equipo se encontró más cómodo en el segundo tiempo frente a los carbayones, pero una relajación por parte de André Leão permitió a Susaeta soltar un latigazo y romper en añicos las esperanzas blanquivioletas de lograr la victoria. Porque ese es otro punto que quería Garitano: morder. El luso no hincó el diente al jugador ovetense y el Pucela pagó caro el fallo.
Pese a ese detalle, el Real Valladolid estuvo a gusto con el 3-5-2 y la opción de jugar con tres centrales puede convertirse en algo más que una alternativa. El técnico blanquivioleta seguirá buscando la tecla defensiva para armar al equipo desde atrás y empezar a lograr resultados más positivos que los cosechados en este inicio de temporada. Habrá que esperar al choque frente a la UE Llagostera para ver por qué optará en esta ocasión el preparador vasco, quien no parará hasta dar con la clave. De momento, parece que el único fijo en la zaga es Marcelo Silva.
