Dos de los descartes del Real Valladolid Promesas encuentran nuevo destino para continuar la práctica del fútbol

Hay vida después del Real Valladolid. Eso piensan Javier Pelayo e Isma Casado que, tras conocer que no iban a contar con gozosas oportunidades bajo la disciplina de Rubén Albés, buscaron otras alternativas para poder continuar su carrera deportiva. Eso sí, con dos casos bien diferenciados: el de Pelayo, que intentará seguir creciendo como futbolista en un filial de un equipo de la Liga 1,2,3, y el del delantero Casado, que opta por ‘volver a casa’.
Pelayo se vinculará al Rayo Vallecano para militar en el segundo equipo que dirigirá Juanvi Peinado. El mediocentro vallisoletano continuará su formación en el Grupo VII de la Tercera División después de una larga vida deportiva vistiendo de blanquivioleta. En la última temporada, eso sí, salió cedido al Cristo Atlético palentino, en busca de esos minutos que no estaba disfrutando en el Real Valladolid.
Esa experiencia en Tercera con el Cristo Atlético, al cual salvó del descenso a Preferente en la última jornada, le servirá para poder aportar su granito de arena a un medio del campo con jugadores importantes de la base rayista como Pablo Clavería.
Pelayo tenía un año más de contrato con el Promesas, pero la falta de oportunidades le llevó a tomar la decisión de abandonar la entidad que ha defendido desde alevines. Ahora, su futuro pasa por Vallecas, donde quiere seguir creciendo y mejorando individualmente.

Isma Casado vuelve ‘a casa’
Bien distinto es el desenlace de Isma Casado aunque su caso compartía bastante similitud la temporada pasada con el de Pelayo. ‘Chino’ también estaba escaso de minutos en el Promesas y trató de buscar un destino que le pudiera brindar esas oportunidades. Ese equipo fue el Arroyo CP con el que jugó los playoffs de ascenso a Segunda División B sin conseguir finalmente el ascenso.
Dos goles en los 428 minutos que disputó en trece partidos diferentes son el bagaje del paso de Isma Casado por la Tercera División extremeña. A pesar de que no fue indiscutible en el Arroyo, la confianza que depositaron en Chino fue bien valorada por parte del jugador.
No obstante, su rumbo para el presente curso variará en gran medida. Desencantado por no tener ni siquiera la oportunidad de poder demostrar en pretemporada con el Promesas, se marchará al CD La Cistérniga, de la Primera Aficionado, con el fin de poder seguir disfrutando de la práctica del fútbol en el equipo de su casa.
