Las naranjas lograron mantener el empate hasta el descanso, pero el gol de las madrileñas al inicio de la segunda mitad acabó con sus opciones

Sesenta y tres minutos. Ese es el tiempo que se mantuvo en pie el planteamiento que el Parquesol puso sobre el césped. Las naranjas buscaban una “segunda machada” tras vencer en campo del Tacón en la primera vuelta.
Pero ni el horario, ni el factor campo, ni esa defensa férrea que implantaron las vallisoletanas aguantaron el empuje de las madrileñas, que derrumbaron el muro y se llevaron tres puntos vitales.
Un hundimiento que llegó con un penalti. Un error de comunicación entre Nuria y Crispi en la lucha de un balón. Las dos fueron a por él y una por otra, la casa sin barrer. Y ya después, Nuria se ‘tragó’ por completo a la extremo del Tacón y el árbitro no dudó en pitar la pena máxima.
Por supuesto, acabó en gol, pese a que María Notario estuvo a punto de pararlo. Todo el trabajo que las naranjas habían realizado durante una hora de partido se diluyó por un error.
Y es que hasta el momento la imagen del partido era indiscutible. Un Parquesol replegado atrás esperando que pasaran los minutos con el empate y cazar alguna contra que las pudiera poner con ventaja. Un planteamiento defensivo desde el minuto uno, ya que en ningún momento las vallisoletanas fueron a buscar al Tacón. Las líneas muy juntas, siempre en su propio campo, intentando que las madrileñas no encontraran huecos.
Hasta el descanso, funcionó. Cosa nada fácil, ya que además del gran nivel del rival, el Parquesol acusó las bajas de Pau en defensa y Ali en ataque. Pero esa defensa en bloque ayudó a que el Tacón tuviera en el primer acto muy pocas ocasiones claras, aunque eso sí, el ataque de las naranjas brillaba por su ausencia. El campo estaba totalmente inclinado hacia el área de Notario. Aun así, se consiguió la hazaña de llegar al intermedio con el resultado gafas.
Con una situación parecida, el Parquesol ya ganó al Tacón en su campo en la primera vuelta. Esperando, teniendo fe en conseguir la oportunidad y acabó llegando en la recta final. Además, en este encuentro de la segunda vuelta, cuanto más tiempo pasaba mayor era el ansia del Tacón. Las blancas estaban obligadas a ganar para meter presión al líder, el Madrid, a una semana de enfrentarse con ellas. Y el empuje tuvo premio con la jugada del penalti y su transformación en el primer tanto. El Parquesol se veía obligado a abrirse si quería rascar algo del encuentro. Y con esas llegaría el segundo tanto.
Al igual que en la jugada del penalti, por la derecha. En el minuto dieciocho de la segunda mitad, control orientado de Mery para definir con una gran vaselina que sorprendió a Notario, que estaba adelantada. El Tacón iba a poder disfrutar de quince minutos plácidos. Hasta ese momento el Parquesol no había inquietado ni una sola vez a Laura Gallego, la portera visitante, ni lo iba a hacer hasta el pitido final.
Aunque ya por obligación, las chicas de Ócar González empezaron a empujar en el tramo final del encuentro, pero sin claro peligro. Eso hizo que las madrileñas aprovecharan los espacios que no habían disfrutado hasta ese segundo gol. Pero lo cierto es que, con huecos o sin ellos, el Tacón mostró esa superioridad tanto con balón como sin él durante los noventa minutos. Arriba, con la velocidad de las extremas, Bardera y Mery a quienes las laterales parquesolinas no pudieron parar siempre y, por supuesto, con Lorena Navarro, la nueve, que supuso una amenaza constante para las centrales.
Y atrás, con muy poco trabajo. Villafáfila apenas controló un balón en campo contrario y Paulita Román luchó, pero sin acierto. Sin embargo, atrás el equipo no se descompuso. En especial, Rivas, que volvió a estar impecable, salvando llegadas del Tacón desde cualquiera de las dos bandas. Pero el gran trabajo sin balón del equipo no da frutos si con posesión no eres capaz de complementarlo, salvo que quieras que el partido acabe con el mismo resultado con el que empieza. Y por ello el Parquesol sucumbió. El plan de Óscar González no resistió noventa minutos, sino una hora, y las naranjas no evitaron la derrota.
Pero esto sigue, y el calendario deja un partidazo la próxima semana. El que medirá a los dos primeros clasificados –Madrid y Tacón–, y que posiblemente aclarará quién merece ocupar la primera plaza. En “la otra liga”, el Parquesol viajará a Getafe para enfrentarse al Alhóndiga, que respira tras conseguir la victoria ante el San Pío a domicilio. Ambos equipos en una posición cómoda en cuanto a sus objetivos, pero sin pensar en relajarse.
CD Parquesol: María Notario; Kela (Ana, min. 88), Rivas, Nuria, Crispi; Nata, Tania (Barbi, min. 72), Judy, Alexia (Paula Martín, min. 88); Paulita, Villafáfila (Sandra, min. 55).
CD Tacón: Laura Gallego; Lucía, Cristina (Samara, min. 60), Valentina, Lucía; Laura del Río, Lola (Lorena, min. 60), Bardera, Mery (Noemí, min. 77); Navarro (Constanza, min. 83), Blanca.
Goles: 0-1, minuto 63: Lorena; 0-2, minuto 76: Mery.
Árbitro: Francisco Rivera García dirigió el encuentro junto a sus asistentes Gonzálvez Alcalde y Martín Alonso. No amonestó a ninguna jugadora.
Incidencias: Gran entrada en el José Luis Saso. El día soleado ayudó a que alededor de unas ochenta personas presenciaran el encuentro correspondiente a la jornada 19 del Grupo V de la Segunda División Femenina.