Desde octubre de 2011 no jugaban a la vez cinco futbolistas con pasado en Los Anexos, como sucedió en el Reino de León con Ángel, Calero, Anuar, Toni y Mayoral durante veintiún minutos

Foto: Cultural Leonesa
El triunfo del Real Valladolid ante la Cultural y Deportiva Leonesa en la tercera eliminatoria de la Copa del Rey dejó unas cuantas noticias positivas, entre ellas, que el impacto de la cantera en el primer equipo es real después de unos cuantos años. Ante las posibles dudas, generadas incluso durante el pasado verano, Luis César ha respondido como se debe: con hechos; poniéndolos.
Así, en el Reino de Léon formaron de inicio cuatro jugadores con pasado en Los Anexos, como son Calero, Ángel, Anuar y Toni. De ellos cuatro, tres pertenecen a la generación del 95 varias veces destacada en este portal como una que después de años de trabajo y espera al fin está comenzando a asomar. El cuarto, el lateral madrileño, es asimilado, pero no menos: pasó dos años en el filial antes de dar el salto el curso pasado al primer plantel.
Por si esto fuera poco, sobre la hora de partido Sampedro introdujo a Mayoral por un destacado Giannis Gianniotas que estrenó titularidad con una gran actuación. Permitió así que hasta la sustitución de Calero en el minuto 82 por Guitián coincidieran los cinco sobre el tapiz. Durante un total de veintiún minutos. Algo que, pudiendo resultar anecdótico, no lo es, o no parece. No parece ser casual o un mero brindis al sol: están para eso, para jugar. Nadie les ha regalado nada.
No cabe duda, para el Real Valladolid se trata de una buena noticia y de un hecho meritorio, sobre todo si se tiene en cuenta que hacía casi seis años que no se daba algo así. La última vez fue el veintinueve de octubre de 2011, en la segunda jornada del campeonato de liga en la Segunda División, en un encuentro disputado en el Estadio de Gran Canaria y en el que la UD Las Palmas venció por uno a cero.
Miroslav Djukic, entrenador por aquel entonces, alineó de inicio a Tekio, Mongil, Jesús Rueda y Óscar González; como ahora, un asimilado, un vallisoletano y dos productos salidos de La Residencia. En la segunda mitad, atravesada la hora de juego, en el 63′, dio entrada a otro hombre de la casa como Javi Baraja y, hasta el 78′ en el que retiró a Óscar, por lo tanto, durante un cuarto de hora, los cinco compartieron tapiz.
Desde entonces ha habido alguna que otra ocasión, se podría decir que unas cuantas, en las que han estado tres o cuatro canteranos a la vez. Nunca cinco, como en el cero a cuatro copero contra la Cultural, lo que habla a las claras de una apuesta cuanto menos regular por el producto forjado aquí durante estos últimos años. Una que, a pesar de las dificultades que los mencionados y utilizados en León están encontrando, al menos se da en forma de hueco y presencia en la primera plantilla.
			