El central explicó que pese a que el Real Valladolid es uno de los equipos más goleados, la mayoría de los tantos provienen de disparos de larga distancia

Tras el día de descanso del que dispuso la plantilla del Real Valladolid ayer martes, hoy miércoles todos los integrantes han vuelto al césped de Los Anexos. Solo Sulayman no completó la sesión de trabajo al verse aquejado de una gastroentiritis. Tras el entreno fue el excordobesista Deivid el encargado de analizar la situación del equipo en rueda de prensa.
El defensor radiografió el último encuentro disputado asegurando que vio al equipo bien y que el resultado pudo ser otro. “Pese a la derrota tuvimos opciones de sacar al menos un punto en Huesca. Al final, cuando el portero de ellos es casi el mejor del partido, algo bien habremos hecho. Quedarnos solo con el resultado yo creo que es equivocado, hicimos un buen trabajo en un campo complicado, un campo pequeño, que para nuestro juego no es lo que mejor nos va, pero el equipo dio la cara y tuvo opciones hasta el final, incluso con diez”, explicabó.
Testigo de lujo, el canario quiso dar su versión sobre la causa de jugar con diez los últimos minutos frente al Huesca. “Me coge al lado. Un cambio de orientación de Míchel, el rival le deja la pierna y luego encima se encara con él. Saca amarilla a los dos sabiendo que Míchel tenía una amarilla”, ilustró el ’15’ del Real Valladolid.
Quiso ir un poco más allá, comentando que el equipo está compitiendo y jugando bien desde la jornada uno, aunque con la excepción de la primera parte contra el Barça B y, pese a que afirma que no le gusta hablar de los árbitros, explica que se han sucedido algunas “situaciones raras” como los dos penaltis en contra que fueron cometidos fuera del área o el gol fantasma de Hervías el otro día.
No obstante, Deivid no rehúsa sus responsabilidades y sabe que se ha encajado un gran número de goles. “Si analizas un poco los goles son tiros fuera del área, o como el día de la Cultural dos en propia y otro un golazo por la escuadra. Pedro nos mete aquí un golazo increíble. El gol de Melero también es desde fuera del área. No es lo normal. Yo creo que defensivamente tenemos que mejorar porque no es aguantable que cada partido tengamos que meter mínimo dos goles para ganar, pero mejoraremos seguro. Lo estamos trabajando con el míster porque dejar la portería a cero es clave en la categoría”, argumentaba el central.
Por otro lado, el tercer capitán blanquivioleta se muestra muy contento e integrado en el equipo. Afirma que se encuentra muy a gusto con sus compañeros de la zaga, que tienen una gran experiencia y que son muy buenas personas. Sobre el aspecto personal explica que no ha cambiado y que no le importa actuar de central zurdo porque está “acostumbrado” y no tiene ningún problema en jugar con el pie izquierdo pese a ser diestro.
Respecto al próximo rival, Deivid guarda buenos recuerdos de su paso por Córdoba. Los verdiblancos no atraviesan su mejor momento y cree que el Pucela puede sacar provecho de ello. “Si un equipo está necesitado y viene de una semana complicada aunque suene tópico, si te pones por delante, ellos quizá se abran un poco más y dejen huecos atrás que es como nos sentimos nosotros cómodos, corriendo a la espalda del equipo contrario”, argumentó.
Finalmente, terminó dando su predilección en el sorteo de mañana de la Copa del Rey en el que, más que ‘pedir’ un rival, desea evitarlo. “Cuanto más cerca mejor. Esto es un premio también para la gente, para la afición, porque ver a un equipo de Primera aquí ilusiona. Por nosotros, que nos toque el más cerca posible. No me gustaría jugar contra Las Palmas porque me sentiría muy raro. No quiero pelearme con mi mujer, que es de allí”, bromeaba Deivid.