En un partido flojo frente al Alhóndiga, las naranjas vencen (1-0) gracias al quinto gol de la extremo y a una antológica intervención de Lucía con el encuentro en tablas
Cuando tu portera es la mejor jugadora del partido, está claro que tu equipo no ha hecho noventa minutos radiantes. Y cuando la razón de que esa guardameta haya sido la más destacada es una única –pero enorme– intervención, quiere decir que ese encuentro no ha tenido mucho de divertido. Pero el fútbol no es un deporte divertido, que si se da la ocasión también, sino que está basado en ganar tres puntos cada jornada.

Foto: Juan Díez
El Parquesol venció al Alhóndiga por la mínima y haciendo lo mínimo. Con una sola ocasión clara de peligro, protagonizada por la jugadora del momento, Alexia, se alarga el idilio de un equipo que sigue en racha.
Aunque, para los más optimistas, este triunfo simboliza más que tres puntos. No tanto por el fondo, sino por la forma, ya que si se analiza profundamente, se podría llegar a la conclusión de que este equipo se está convirtiendo en un grande. Desde luego, no es un tópico. Para que un conjunto pase a calificarse con ese adjetivo, son necesarios cuatro atributos, y el Parquesol ha reunido todos este domingo.
Para empezar, saber sufrir. Eso hicieron toda la primera mitad, y buena parte de la segunda. Sin ideas, sin comunicación, a ratos sin balón, y viendo cómo el Alhóndiga era el único equipo que, al menos, pisaba el área contraria, aunque fuera sin maravillar al público.
Ya no solo pisarla, sino meterse de lleno, como ocurrió al inicio de la segunda parte, cuando Marta, después de marear a Nuria en un contraataque, tuvo la mejor ocasión para las madrileñas. Desgraciadamente para sus intereses, la once se topó con el segundo requisito que hace grande al Parquesol: una gran portera.
Con esa intervención, Lucía se proclamaba oficialmente como la mejor del partido –tampoco era difícil–, y ya no dejaba dudas a nadie de que es un pilar –por no decir cosas mayores– para esta temporada. También fue aliado el larguero que, minutos más tarde, escupió un latigazo de Noelia, en una falta directa.
Las pucelanas se salvaron de ir perdiendo, algo que habría sido injusto. Porque ninguno de los dos equipos mereció marcar en un choque que se podría calificar como espeso para los entrenadores, soporífero para el espectador y «muy técnico» para aquellos periodistas que no se atreven a decir directamente que el partido es malo.
Alexia, nueva pichichi del Parquesol
De eso no entiende Alexia, que, lejos de méritos, amplió su cuenta de goles –cinco en dos partidos–. Recogió el balón en el área, controló y, casi sin ángulo, se la coló a la derecha de la portería de Gema. He aquí la tercera propiedad de un equipo de élite: una futbolista que tenga capacidad de enchufar una, sean cuales sean las circunstancias del partido.
Pasaban los minutos y suponía una obviedad que quien marcara se llevaría el gato al agua. Por ello, tras el solitario tanto, ya no hubo tiempo para más. Solo se pudo ver cansancio acumulado en las caras de las jugadoras, gritos de impotencia en las voces de las getafenses y algún tímido consejo desde las gradas, dirigido hacia el colegiado, invitándole educadamente a que avanzara el reloj hacia el minuto noventa.
Y, suponiendo que sin hacerles caso, sí se llegó al final, confirmando la cuarta incógnita de la ecuación: ganar sin merecerlo. Porque, en líneas generales, el Parquesol no mereció el triunfo; tampoco perder. Todo apuntaba al típico encuentro en el que se empata a cero y se piensa en el siguiente, a poder ser sin lesiones –más en el caso de las locales, que arrastran unas cuantas– y sin venirse abajo. Pero Alexia prefiere no hacer caso de esas suposiciones, en favor de alargar su dulce estado de forma con otra diana.
Como el de todo el equipo naranja, que sigue cuarto, a un punto de los primeros. Este próximo domingo tendrá que enfrentarse a uno de ellos, el Rayo Vallecano B, que quiere ‘hacer de Parquesol’ este año y convertirse en el equipo revelación. De momento no ha perdido, pero tendrá difícil no hacerlo esta semana. Se enfrenta a un grande, y a todo lo que ello conlleva.
CD Parquesol: Lucía; Crispi (Kela, min. 86), Maka (Elsa, min. 89), Noelia, Nuria (Judy, min. 62); Barbi, Nata, Sandra, Alexia; Rivas y Charle (Lore, min. 85).
A.D. Alhóndiga: Gema; Fide, Laura Encina (Yolanda, min. 63), Laura Martínez, Jennifer (María, min.82); Marta, Ruth, Acedo (Sara, min. 68), Rocío (Noelia, min. 46); Marta y Miriam.
Goles: 1-0: Alexia, min. 79.
Árbitro: Dirigió el encuentro Daniel Reinoso Mangas, asistido en las bandas por Rodrigo Santos y Víctor Revuelta. Amonestó a Maka en la segunda mitad.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada seis del Grupo V de la Segunda División Femenina. Alrededor de cien personas asistieron al encuentro, en una tarde cálida y soleada en el José Luis Saso.