El central andaluz hizo autocrítica después de la sesión de este miércoles, en la que las dos primeras plantillas del Real Valladolid se enfrentaron en un partidillo que ganaron los de Luis César

El Real Valladolid continúa con su preparación para la visita al FC Barcelona B, que tendrá ocasión este sábado, este miércoles, con un partidillo contra el Promesas, en el que los pupilos de Luis César –sin Gianniotas, con molestias musculares– ganaron por cuatro a cero, merced a los tantos de Chris Ramos, Óscar Plano, Toni y Villalibre.
Tras la sesión, Kiko Olivas atendió a los medios de comunicación, y fue más autocrítico que alguno de sus compañeros después de la derrota en Pamplona ante Osasuna, cuyo empate «mató» al equipo en un partido que se decidió «en dos minutos». Antes y ahora, los blanquivioletas trabajan en que aquello que llevó a cosechar un nuevo tropiezo no se repita, aunque las razones de los goles son diferentes. «Los hemos recibido a balón parado o en jugadas aisladas, y los últimos en desajustes o en fallos individuales. Hay que corregir y mantenernos firmes«, alegó el central.
Los goles encajados son «un factor que hay que mejorar» y es «el propósito de todo el equipo», puesto que si bien «los defensas son los señalados, es trabajo colectivo, igual que el ataque». «Está claro que está costando muchos puntos. El míster nos ha dejado claro que tenemos que recibir menos goles», explicó Olivas, para quien «la idea que tiene el míster es buena», a pesar de que no estén «saliendo las cosas».
«Estamos teniendo desajustes que llevamos varias semanas trabajando. Hay que reforzar ese trabajo porque las cosas no están saliendo. Estamos a gusto, pero hay que mejorar sabiendo todo el mundo lo que tiene que hacer», agregó el defensor, que incidió en que si se dio la remontada en El Sadar es porque «las líneas no estaban lo ordenadas que debían», pero que llevan «semanas trabajando, haciendo hincapié en eso» para que en situaciones semejantes no les vayan a remontar.
En este mercado invernal es obvio que el Real Valladolid se reforzará, y su puesto está señalado por mor de esos goles encajados. En general, Kiko Olivas ve «una buena plantilla» y cree que cuando estén todos «más sólidos los resultados van a llegar», si bien no cierra la puerta a esos eventuales fichajes. «Todo lo que venga a ayudar es bueno», comentó, porque lo que quieren todos es «tener algo que celebrar al final de temporada».
Ahora bien, si llegara un central –a día de hoy no lo parece– la competencia incrementaría, algo que no le preocupa. «Si viene un central tendré que dar mucho más de mí para que el técnico confíe y me ponga. Yo intento dar lo máximo que tengo y tengo que exigirme mucho más. Todos tenemos que dar mucho más, porque la plantilla está conformada para estar más arriba, pero vamos a seguir peleando cada día», concluyó.