El entrenador del Real Valladolid de División de Honor se muestra confiado de poder acabar cuartos, pese al pequeño tropiezo

El Real Valladolid no pudo volver a sumar de tres en casa contra el CD Leganés en un partido en el que se vio condicionado por el viento, que dificultó el juego de los blanquivioletas.
Aunque su entrenador, Víctor Fernández, cree que este factor «condicionó mucho», no quiso usarlo como argumento exculpatorio de su equipo; hizo también autocrítica. «Hemos estado tanto tiempo buscando el objetivo de la cuarta plaza que quizá ha habido un puntito de relajación y el equipo no ha estado tan intenso y motivado como en anteriores ocasiones. De haberlo estado, habría sido un poquito más superior», valoró.
A su modo de ver, siempre fue superior el que jugó «con el aire a favor», y enfrente había «un gran rival», que aunque empezó mal la liga, tiene «un gran nivel», con «grandes jugadores y un buen entrenador». Tal es así que afirmó que «lo justo es el empate, porque hicieron un buen trabajo», aunque, reiteró, sin el viento que hizo puede que sus pupilos hubieran sido «más superiores».
Después de conseguir «lo más difícil», que era marcar el uno a cero, en la jugada siguiente el ‘Lega’ empató con celeridad, nada más sacar de campo, algo que el técnico achacó al «puntito de relajación» que pudo embriagar a sus pupilos «después de ochenta minutos trabajando contra el aire y contra el rival». «Cuando han metido el gol se pensaban que habían ganado el partido. Queríamos hacer un cambio más defensivo, porque habíamos metido a varios jugadores ofensivos para buscar la victoria, pero no nos dio tiempo a meter a Jairo», que habría reforzado el centro del campo.
El empate, sobre el papel, favorece al Getafe en la lucha por la cuarta posición, toda vez que los azulones se enfrentan este domingo al Almendralejo en su casa. No obstante, hay cierta confianza en el vestuario blanquivioleta, porque saben que tiene que jugar contra el Atlético de Madrid e «incluso el empate» les podría «valer». Siempre que ganen sus dos partidos, el siguiente, fuera de casa ante el Aravaca. «Vamos a ir a ganar; este equipo no sabe ir a empatar. Es un campo difícil, pequeño, pero hay que aprender a jugar en campos así, en los que a lo mejor no se puede tocar tanto», concluyó Víctor.