El máximo mandatario del Real Valladolid muestra su alegría por el “premio” de play-off, aunque todavía espera “el gordo” en forma de ascenso
Todavía en el túnel de vestuarios, Carlos Suárez no dejó pasar la oportunidad de dar la enhorabuena a Sergio González por la clasificación para el play-off tras ganar a Osasuna. Minutos más tarde fue requerido por los medios de comunicación para pulsar su ánimo, elevado, como no podía ser de otra forma. Aunque el máximo mandatario del Real Valladolid, como cualquier integrante de la entidad –como por ejemplo dos de los jugadores, Pablo Hervías o Borja Fernández, protagonistas también en zona mixta–, sabe que todavía queda algo más “gordo” a lo que aspirar: el soñado ascenso a Primera.
“Hemos conseguido el premio que buscábamos. Desde hace tiempo lo veíamos muy cerca; la semana pasada y la anterior habíamos conseguido estar ahí. Pero conseguirlo no es quitarse un peso porque es lo que queríamos; sabíamos que iba a ser difícil pero que ganando nos metíamos donde nos hemos merecido de un tiempo a esta parte“, analizó el presidente.
Y buena parte de mérito es de Sergio González, con quien se retrotrajo al día de la presentación. “Entonces lo dije; me convenció y me hizo creer otra vez cuando lo fichamos, después de haber perdido cuatro oportunidades de meternos. Él nos hizo creer a todos que era posible y que lo iba a conseguir“, como así ha hecho, ganándose la renovación en virtud de la cláusula en su contrato que decía que seguiría si promocionaba.
Pero quedan todavía objetivos por cumplir. El deseo de todos, y de Suárez, es “seguir en esta dinámica y ascender”. Y, por ello, le daba “igual” quién fuera el rival con tal de promocionar. “Creo que podemos ganar al Sporting, al Zaragoza o al Numancia. Lo único que hace falta es seguir en la misma dinámica. Esto no ha acabado; ha sido un premio al esfuerzo, pero no el gordo, que es lo que tenemos que buscar“, confirmó.
Para ello, el club querrá contar de nuevo con el apoyo de la afición, importante “no solo durante el recibimiento”, sino durante toda la semana. “En un día y tres cuartas partes del siguiente se agotaron las entradas. Se ha vivido fútbol y se ha respirado fútbol. Eso es bueno para el Real Valladolid, para la ciudad y para todos”, aseveró Carlos Suárez, quien destacó la cohesión del grupo como una de las claves del éxito. “El equipo llega bien por el estado de forma en el que se encuentra y porque está jugando bien. Ha confiado en sus posibilidades y sabe que son muy buenos jugadores. Cuando el grupo se ha cohesionado ha sido más fácil”, ponderó.