El canterano tiene muchas papeletas de ser titular frente al Sporting de Gijón debido a la sanción de Míchel. Lo haga o no, confía en que el equipo «gane y no encaje gol»

Los sueños a veces se cumplen. Y el enésimo de Anuar está a punto de hacerlo. Soñó con debutar en el primer equipo que le vio crecer y está a muy poco de dar otro paso. La baja de Míchel por sanción le abre la puerta de la titularidad en un partido clave para el Real Valladolid, nada más y nada menos que la ida de la semifinal de ascenso a Primera.
«Aún no sé si voy a jugar de titular, pero si al final es así, yo me veo capacitado ya que es un partido que desde niño he soñado jugar«, dijo el ceutí en rueda de prensa.
Porque la última vez que el Real Valladolid subió a Primera, en junio de 2012, Anuar era cadete y vivió el ascenso ante el Alcorcón de recogepelotas. «Que yo ahora pueda tener una posibilidad de jugar… me hace una ilusión increíble pensar que puedo defender el escudo«, exclamó.
Él es el vivo reflejo de la ilusión que vive el vestuario blanquivioleta. «Estamos motivadísimos», confesó el canterano, más si cabe con la inyección de energía que está insuflando la afición. «Solo hizo falta ver el recibimiento desde que bajamos del autobús; al equipo solo hay que verle la trayectoria ascendente. Estamos más confiados y más capacitados para sacar la eliminatoria adelante que nunca», arguyó.
Anuar no quiso mojarse en qué equipo es favorito para pasar a la final, pero confía en que acabe muy bien para los blanquivioletas. «En los play-off nunca hay un favorito, solo hay que ver los anteriores y quién ha ascendido. Cualquier equipo puede subir a Primera, pero yo estoy confiado en que nos espera un bonito destino por delante», auguró. De momento, el primer paso es superar al Sporting en un partido en el que van a ir a por él «desde el minuto uno», pero sin «volverse locos». «Me conformo con que el equipo salga orgulloso del trabajo, ganar y no encajar gol«, espetó el centrocampista.
Porque si hay una cosa en la que puede parecerse el partido de liga a esta ida de semifinales de play-off es en eso, en el trabajo y en el orgullo de cada jugador blanquivioleta. «Aún recordamos que perdimos contra ellos en un partido en el que el equipo dio todo hasta el último minuto y salió orgulloso de lo que hizo. Ahí nos dimos cuenta de que todo era posible«, expresó. Si bien confesó que será totalmente «diferente», en el que el Pucela llega «en un buen momento» unido al plus que supone ver Zorrilla lleno.
La afición calentará motores tres horas antes del partido, con fanzone incluida y recibimiento al autobús como frente a Osasuna. «Yo nunca había visto ese ambiente tanto tiempo antes y desde el bus sentíamos más cerca que nunca a la gente», confesó. También se mimetizó con los simpatizantes pucelanos y cantó antes de entrar a vestuarios. Después el equipo ganó. Que la historia se repita una vez más y los sueños de Anuar se cumplan.