Tras marcar el último gol –el número treinta y cinco– con la camiseta del Real Valladolid, el delantero espera «poder regresar algún día al club»

El Real Valladolid disfruta este sábado de que, por fin, está en Primera, cuatro años después. Y si hay que darle a un jugador la máxima responsabilidad del ascenso del Real Valladolid a Primera, ese es sin duda Jaime Mata. Sin embargo, en el fútbol siempre existe un pero: el «Mata, quédate», cantado una y otra vez por Zorrilla, no va a surtir efecto.
«Me dará pena volver con la camiseta de otro equipo», afirmó. Pero su destino ya está teñido de azulón y es algo a lo que la hinchada blanquivioleta se tendrá que acostumbrar. Aun así, deja un atisbo de esperanza: «Ojalá algún día pueda volver».
Pero eso será el año que viene porque ahora le toca disfrutar del ascenso, que era su sueño: “Deseaba ascender con algún equipo y vine a Valladolid para eso. Y al final todos lo hemos logrado”, subrayó. Y si ese sueño se ha cumplido buena parte es gracias a Mata. Ni él mismo da crédito a su cifra goleadora. “Lo de los goles es una locura y haber metido el último del año, aún más”, destacó.
Al final, «un ascenso a Primera es muy complicado» y Mata ha tenido la suerte –si se puede llamar así– de disfrutarlo. Algo que para él, por mucho que se marche, ya es «un recuerdo imborrable».