Después de pasar por catorce equipos distintos, el ariete ha regresado esta temporada a su casa, el Betis CF, equipo que «debe estar en Tercera División», pese a su mal comienzo de temporada en Regional

Después de veinte años de trotamundos, Diego Torres ha regresado esta temporada a sus orígenes, al Betis CF, en una temporada complicada hasta el momento pues el conjunto verdiblanco no está cumpliendo las expectativas planeadas antes de iniciar el curso. Sin embargo, este fin de semana la victoria frente al Ribert ha hecho respirar al conjunto de Óscar González, si bien todavía tienen que entrar en una dinámica positiva.
«Nos está costando mucho porque cometemos bastantes errores. Casi siempre nos adelantamos y nos remontan porque nos entra la ansiedad de que, con muy poco, nos hacen gol. Pero esta victoria nos hacía falta para coger confianza», destacó Diego Torres en los micrófonos de #HacemosCantera en Radio Marca, en la que contó el triunfo bético tras nueve partidos sin conseguirlo.
Aun así, el ariete reconoce que la posición en la tabla está muy lejos de la que se planteó al principio. «El equipo ha formado una plantilla muy competitiva, ha firmado a los mejores de la categoría, pero las cosas no están saliendo», admitió y añadió como nota positiva que, pase lo que pase, para el próximo año habrá «un bloque asentado» para empezar de distinta manera y colocar al equipo donde se merece: «Sin desmerecer al resto de equipos, el lugar del Betis es la Tercera División«.
Y, como no podría ser de otra forma y pese a su edad, Diego Torres ‘amenaza’ con continuar en ese proyecto el próximo año. «Me siento muy cómodo. Es verdad que en España miran mucho el DNI, pero cada domingo sigo metiendo goles y eso me anima a seguir, porque me enorgullece tener la misma ilusión que cuando empecé«, argumentó el bético, que resaltó el hecho de que ha podido tocar todas las categorías del fútbol, aunque no por ello se pone como ejemplo: «Mis compañeros pueden ver que soy uno más».
Dentro de su enorme carrera en el fútbol profesional destaca su debut en Primera en el Extremadura con apenas dieciocho años y también su ascenso con el Nástic, aunque se le ha quedado una espina clavada: «Me habría encantado vestir la camiseta del Real Valladolid a nivel profesional».
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