Las naranjas tienen la oportunidad de cosechar el mejor resultado de su historia; una segunda plaza que serviría para redondear el ascenso

Hace dos temporadas, el CD Parquesol logró una cuarta posición histórica, después de llegar a luchar por el descenso anteriormente. El año pasado, en el último minuto, consiguió superarlo y quedó tercero; el primero de los mortales. La clara demostración de que este equipo es un modelo de superación es que 365 días después, tiene en su mano superar todos sus récords. Una vez más.
La barrera entre el sobresaliente y el notable, puesto que si no se logra la segunda plaza el mérito de la temporada no va a decaer, es de solo un punto. Parece fácil, más incluso porque el Parquesol este domingo (12:00 horas) juega en casa, pero el rival que tiene en frente si ya es bueno de por sí, más difícil lo pondrá aún por el hecho de jugarse ese puesto de plata.
Tanto Parquesol como Atlético B ya son equipos de Primera B pero se disputan un premio mayor. El segundo puesto ha sido ocupado por ambos en varias fases de la temporada, si bien las vallisoletanas llevan instaladas en él desde la jornada 18. No obstante, la derrota ante el Rayo B la pasada semana hace que se lo jueguen a cara o cruz. La victoria y el empate valen, pero un triunfo rojiblanco provocaría el sorpasso en la última jornada.
Aun así, sucede que en el fútbol quien sale a empatar generalmente pierde. «Tanto nosotros como ellas vamos a salir a por todas, no vamos a defender. No tenemos en juego nada deportivo, pero sí el orgullo de lograr la segunda plaza», avisa Rubén Jiménez que, tras una mala semana que terminó con la derrota en Vallecas, ve al equipo “motivado” y con una concentración mayor.
«Conseguir el objetivo a falta de cuatro jornadas desgasta la dinámica, por mucho que intentemos evitarlo», reconoce el míster naranja. No obstante, considera «muy bonita» la posibilidad de quedar por encima de los filiales, si bien lo califica de «simbólico», puesto que la temporada no se va a empañar por mucho que no se consiga puntuar el domingo.
Todo dependerá de lo finas que estén las naranjas, porque Rubén espera a un Atlético muy potente. «Tienen jugadoras muy verticales, con Anita Marcos como delantera, la suplente del primer equipo. Es un equipo echado al ataque, con juego directo y buscaremos contrarrestar el dominio», analiza. Y, desde luego, un buen plan ante las rojiblancas será más importante que nunca.
Con la siguiente convocatoria de dieciocho jugadoras acude Rubén Jiménez: Lucía, Martina, Iria, Carla, Maka, Noe, Ali, Nata, Rivas, Charle, Sandra, Yarima, Paulita, Ali Rey, Murita, Carolina, Barbi y Judy. De ahí, el técnico tendrá que apostar por el once inicial, el último de una temporada que echa el telón para desgracia de los amantes del buen fútbol que, unas semanas más que otras, se ha podido encontrar a orillas del Saso.