El cuadro de Santi Sedano vence por cuatro a cero al Becerril y espanta de un plumazo sus rachas de derrotas seguidas y de partidos sin ganar
Si alguien soñó en el Atlético Tordesillas con la manera de dejar atrás la mala racha que estaba enviándole al fondo de la tabla, seguramente se pareciera mucho a la forma en que ganó al CD Becerril. Venció y convenció, borró, al menos por un día, los malos augurios; respondió con firmeza a las dudas y espantó las malas sensaciones reafirmándose en aspectos en los que debía (y seguramente aún deba) mejorar.
Porque el cuatro a cero fue justo y, vista la elevada producción ofensiva, incluso quizás escaso. Porque defensivamente se mostró más seguro que ningún día, no concediendo más que una ocasión aislada en el arranque de la segunda mitad. Y porque la juventud se mostró contestataria; Campos y Rafa, dos de los cedidos del Real Valladolid, brillaron, y Julio lo hizo también al final.
El Tordesillas salió a mandar enredándose poco, prescindiendo de tocar mucho el balón en la sala de máquinas y dirigiéndolo hacia las alas, que se desplegaban y aleteaban con rapidez y verticalidad.
Así, los citados Campos y Rafa llevaron mucho peligro a la portería palentina desde los primeros compases, en los cuales el primero creó tres ocasiones, una para sí y dos para sus compañeros. Sería el segundo quien, después de un pequeño lío dentro del área y de varios rechazos, hiciera el uno a cero al alimón con Roberto Simón.
El cuadro morado no ofreció respuesta en la primera mitad y Roberto Simón pudo marcar el segundo antes del descanso, que sentó mejor a los visitantes. Así, en los primeros minutos, pidieron un penalti, lo intentaron en alguna tímida ocasión a balón parado y en una más clara de Kuko, que erró con todo a favor. Rafa volvió a hacer acto de presencia, primero para acariciar el gol en un contragolpe y después para abrazarlo y convertir el dos a cero tras un pase de Roberto Simón.
El tanto devolvió la tranquilidad al Torde, que recobró el dominio para nunca más abandonarlo. La vieja guardia, liderada por el redebutante Joni, que actuó en el centro del campo y ejerció de comandante en jefe, serenó los ánimos y permitió encaminarse hacia un nuevo triunfo, aunque sin dormirse, puesto que los rojiblancos generaron varias oportunidades más para ampliar la cuenta, que se hacía escasa.
Julio aprovechó sus minutos con un doblete en el tramo final, que sirvió para hacer las sonrisas más amplias. Primero superó a Sevi con un disparo duro desde la frontal, después de varios recortes, y después, con un remate a bote pronto con el que remachó un centro bombeado de Rafa. La fiesta final, por tanto, fue completa, aunque todavía quede muchísimo por remar.
Y es que el Atlético Tordesillas sigue en puestos de descenso, aunque a solo un punto de la permanencia, que marca La Bañeza. Ahuyentó fantasmas y dijo adiós a las siete derrotas seguidas y los once partidos sin conseguir una victoria, pero debe seguir despejando dudas, a poder ser, para empezar, con una buena actuación el próximo fin de semana en La Eragudina, ante el Atlético Astorga.
Atlético Tordesillas: Farolo; Aitor Blanco, Miguel, Abraham, Villa; Joni (Cisneros, min. 86), Héctor; Campos (Julio, min. 79), Asamoah (Luismi, min. 58), Rafa; y Roberto Simón.
CD Becerril: Sevi; Diego, Merino, Sierra, Jesús; Diestro, Peli; Guti (Kike, min. 69), Melero (Adri, min.78), Eloy (Isma, min. 75); y Kuko.
Goles: 1-0, min. 28: Rafa. 2-0, min. 67: Rafa. 3-0, min. 91: Julio. 4-0, min. 93: Julio.
Árbitro: Álvarez Rodríguez. Amonestó a los locales Abraham, Villa, Campos, Julio y a su delegado Manuel San Nicolás y al visitante Jesús.
Incidencias: Partido correspondiente a la decimoquinta jornada del Grupo VII de Tercera División, disputado en Las Salinas, ante unos 400 espectadores.