El exjugador del Real Valladolid Promesas ha dado cuatro puntos en el tiempo añadido al Cristo Atlético. Es, después de Julio, punta del Atlético Tordesillas, el futbolista que más marca a partir del minuto ochenta
Cuando la vista se nubla, cuando las piernas fallan y el cansancio y la presión quieren salir vencedoras, hay quien se mueve como pez en el agua. El sprint o rush final es importante en los deportes consistentes en carreras; también, en los finales apretados en los de equipo. La ‘Zona Cesarini’, o como es conocida en el basket, el ‘clutch time’, periodo en el que se deciden incluso títulos, y si no que pregunten en Múnich si se acuerdan de Solksjaer y de aquella final en el Camp Nou.
Cuando el hoy técnico del Manchester United marcó, el nuevo rey ‘tardío’ del Grupo VIII de Tercera División apenas tenía dos meses de vida. El que fuera jugador del Real Valladolid Promesas, Charaf Taoualy, sabe lo que es ser decisivo durante esos instantes finales. Aunque en un contexto competitivo que nada tiene que ver con ‘la orejona’, el centrocampista de Los Palacios lo ha sido ya en dos ocasiones: ha dado cuatro puntos al Palencia Cristo Atlético con el tiempo cumplido.
El hoy futbolista morado lleva cuatro goles en la presente temporada, y tres de ellos han sido a partir del minuto ochenta, si bien el tercero no sirvió para dar puntos a su equipo (sí para sentenciar otro triunfo). Gracias a estos tantos, a uno de Abel Pascual y a otro de Edu Vallecillo, el palentino es el equipo que más ha puntuado en el tramo final gracias a esos goles: ha sacado siete unidades, merced a esos cinco tantos, superando las que han podido obtener otros clubes como el Almazán o el Zamora.
Pero si hay un jugador que está destacando en el ‘clutch time’, sin duda es Julio Rengel, delantero del Atlético Tordesillas, que se está erigiendo en el Luka Doncic de la Tercera gracias a sus cuatro goles marcados en las postrimerías de tres partidos distintos. En su caso, todavía no ha sido capaz de incidir de manera directa en un resultado, si bien ha demostrado que la responsabilidad no le pesa en esos momentos a menudo decisivos.
Así, contra el Becerril se hizo un Tracy McGrady, con dos tantos en el tiempo supletorio que confirmaron la goleada del conjunto de la Villa del Tratado sobre el palentino. No es el único vallisoletano que ha conseguido marcar en esos momentos: Alejandro Altube o Rodri Escudero, delanteros del Salamanca B y de Zamora, respectivamente, también saben lo que es imitar las muñequitas calientes de la NBA viendo puerta justo antes del silbatazo final. En el caso del primero, además, sirvió para que su equipo sumara dos puntos.