El Real Valladolid busca ganar su primer partido en casa tras el parón y asegurar de manera casi definitiva la salvación
Foto: LaLiga
Después de tres jornadas consecutivas jugando contra equipos que luchan por una plaza en la próxima Champions League, el Real Valladolid se mide de nuevo a un conjunto más cercano a su nivel –si se tienen en cuenta sus objetivos y su lugar en la tabla– como es el Levante UD. Los granotas viajan a Pucela con 41 puntos en su haber y, salvo catástrofe sin precedentes, se podría decir que ya salvados.
Ya en las declaraciones a pie de campo nada más terminar la jornada pasada Kiko Olivas señaló la tranquilidad que supondría ganar el siguiente partido en casa a estas alturas. Y es que, como todos los años, la pelea por la salvación está bastante apretada. Ahora mismo Alavés, Eibar y Real Valladolid se encuentran empatados con 35 puntos.
Tras el buen partido en el Sánchez-Pizjuán, en el que pudieron incluso terminar llevándose los tres puntos, a los blanquivioletas se les ve bastante confiados para poder sumar esta jornada y alejarse del Mallorca, que ahora mismo marca los puestos de descenso.
En estas condiciones, una victoria de los locales reduciría las distancias con aquellos equipos que se supone que no deben sufrir mucho en lo que queda de liga y gozan de una buena posición en la tabla, como el propio Levante u Osasuna.
Por su parte, los de Paco López vienen de golear de manera contundente a un Betis al que se le está atragantando la temporada. Los valencianos llegaron a estar cuatro goles por encima en el marcador, aunque finalmente les recortaran distancias. En su vuelta a la competición no han obtenido malos resultados: solo han sufrido una derrota, contra el Atlético de Madrid, que precisamente también ganó al Pucela, y luego han cosechado dos victorias y dos empates.
Con los 41 puntos que suman se suele decir que te aseguras la permanencia. Es probable que por esto mismo salgan menos presionados que sus rivales, que todavía tienen bastante por decidir. No va a ser ni mucho menos un partido en el que alineen a sus suplentes, o eso espera Sergio, pero el Real Valladolid puede aprovechar ese plus que tiene el seguir luchando por continuar un año más en Primera.
Además, ambos equipos guardan buen recuerdo de su lucha por la permanencia la temporada pasada, cuando la victoria del Real Valladolid sobre el Rayo Vallecano y el triunfo del Levante en Montilivi ante el Girona certificaron la salvación de los dos conjuntos.
Sergio González cuenta con Sergi Guardiola y Joaquín, ausentes en Sevilla, y con varios jugadores del filial, como viene siendo habitual; véase Miguel o Kike Pérez, que ya han disputado algunos minutos durante estas jornadas (el punta tudelano incluso fue titular la última jornada). En cambio, son baja por molestias Caro, Pedro Porro, Matheus Fernandes y Sandro. Estos tres últimos, como anunció el club, seguirán hasta el término de la competición como blanquivioletas, pese a estar cedidos.
La lista completa de veintitrés la conforman Masip, Samu Pérez, Antoñito, Moyano, Kiko Olivas, Joaquín, Salisu, Javi Sánchez, Carnero, Nacho, Óscar Plano, Pablo Hervías, Víctor García, Fede San Emeterio, Alcaraz, Míchel, Kike Pérez, Toni Villa, Waldo, Ben Arfa, Sergi Guardiola y Enes Ünal.
Para el encuentro el Levante aún no ha hecho oficial su lista de convocados, pero se espera que viajen todos los titulares y algún futbolista del segundo equipo. No obstante, es oficial que no podrá contar con el defensa Iván López por molestias en la rodilla.
