El Real Valladolid, que viaja al Wanda sin Orellana y Guardiola, se enfrenta al equipo con mejores estadísticas de la Primera División

Este sábado, a las 18:30 horas, y para subir un poco el termostato, que ha caído en picado con la llegada de diciembre, el Real Valladolid de Sergio González se enfrenta a uno de los mejores equipos de la Primera División, el Atlético de Madrid. El estilo brusco y poco gustoso de ‘El Cholo’, al menos el de anteriores temporadas, parece haberse remozado y amenaza con aguar la fiesta al combinado blanquivioleta. Para Nacho, quien ya sabe lo que es sufrir su intensidad, los colchoneros han dado un salto de calidad respecto al año pasado, y poco importa que este arrastre los minutos de la Champions, porque su amplio fondo de armario hará que en el Metropolitano vista un once de lujo.
El partido, por lo tanto, se antoja muy complicado. Nada menos que veintitrés puntos de veintisiete posibles y un casillero a cero de derrotas son las estadísticas de las que presume el Atleti. Por si fuera poco, hay otro dato descomunal: en sus nueve encuentros disputados solo ha encajado dos goles, lo que sumado a sus diecinueve tantos a favor arroja un balance solo igualable por el otro líder de la Liga, la Real Sociedad. El Real Valladolid, por su parte, es de los equipos más frágiles en defensa gracias a sus dieciséis goles en contra y se coloca en la decimoséptima posición. En el casillero de puntos, diez unidades, mismas que el Celta de Vigo, con el que se inician los puestos de descenso.
En el último enfrentamiento, el Real Valladolid dejó escapar, como ya hiciera ante el Huesca, dos puntos importantísimos para el objetivo que le ocupa. Su alineación, en la que ya parecen afianzarse nombres como el de Hervías o Masip, suplente en el arranque de campaña, sigue sin arrojar la confianza necesaria como para sentir que el Pucela tomará impulso de una zona roja de la que consiguió salir hace apenas un par de semanas. La mejor noticia, en medio de esa zozobra general por un juego que se trunca al menor de los imprevistos, la explosión del delantero Marcos André, quien firma tres goles en las tres últimas jornadas.
Para los madrileños, en cambio, todo es música de violines. João Félix, al que su afición deseaba ver desatar toda su magia, ha encontrado la continuidad que le hacía falta para ser un jugador importante. El cambio de sistema, que ha optado por la defensa de tres centrales, ha permitido ver la mejor versión de un Carrasco que llega con molestias en su rodilla y de un Correa en fantástico estado de forma. Hasta jugadores desaparecidos o un tanto estancados como Koke o Lemar, el mejor en el duelo frente al Valencia, están rindiendo a un gran nivel. Y de la fiabilidad de Jan Oblak en portería poco hay que añadir más allá de las estadísticas que firma. Un verdadero muro.
Pese a las aseveraciones de Nacho, que no se fía del cansancio de su rival tras unas semanas intensas de partidos, con un cruce ante el Barça, una Champions de por medio (donde el Atleti aun no tiene garantizado el pase de ronda), así como un derbi a la vista, está claro que la acumulación de minutos y las rotaciones en las filas locales pueden ser las mejores bazas para que los de Pisuerga saquen algo positivo. Si bien Luis Suárez ha dado negativo en su último test de coronavirus, el ariete Diego Costa es baja segura, como también lo es José María Giménez, lesionado en el encuentro europeo ante el Bayern. Además, el antes mencionado Koke, pieza capital en este cuadro, acumula cuatro tarjetas amarillas, por lo que no sería descabellado una suplencia del capitán vistos los próximos compromisos o, si acaso, que jugase con el freno de mano puesto para no perderse esas citas.
El técnico del Real Valladolid ya ha dicho que viajan a la capital «sin miedo», aunque también sin Guardiola y sin Orellana, ambos con molestias. En ese sentido, parece que el enfrentamiento puede abrir la puerta al punta israelí, Weissman, al que muchos aspiran a ver con algo más de continuidad. Marcos André, dado su estado de forma, apunta a claro titular. Y puestos a pensar en un once ultraofensivo cabe señalar la presencia de Jota, otro de los fichajes que ilusionan, pero que apenas han contado con minutos. La principal novedad en la convocatoria, no obstante, es la presencia de Sergio Benito, delantero del Promesas.
Con todo, la cita del sábado tarde dibuja un auténtico reto para la plantilla vallisoletana, que deberá echar el resto sobre el césped del Wanda. El Atlético de Madrid, por su parte, uiere aumentar su racha de imbatibilidad en casa, que se alarga hasta los veintiún choques o, lo que es lo mismo, un año sin perder como local. Casi nada.