El Atlético de Pinto neutralizó el gol inicial de Torres y aunque los de Baptista lo intentaron hasta el final, no fueron capaces de materializar su superioridad

La falta de acierto de cara a puerta evitó que el Real Valladolid de División de Honor pudiera seguir con su pleno de victorias como local. A pesar de las múltiples ocasiones de las que dispusieron los pupilos de Julio Baptista, el Atlético de Pinto arañó un punto que le supo a tres.
De inicio, a los blanquivioletas se les pusieron las cosas de cara, con un gol tempranero de Torres a centro de Maroto, en una segunda acción procedente de una jugada a balón parado. El hecho de que solamente hubieran pasado diez minutos y el dominio de los locales hacían que se presagiara otro duelo ‘marca de la casa’.
Y lo fue, en cierto sentido. La hiperactividad de Popi y Adrián Carrión y las llegadas desde atrás de Adrián Álvarez o Maroto, así como los movimientos en punta de Abel Calleja, permitieron que sobre la puerta de Pita llegaran acercamientos u ocasiones de todos ellos, ninguna tan clara como para poner el segundo, no obstante.
Al borde del descanso, en una de esas acciones en las que pisó área, Popi cayó dentro de ella con ostensibles gestos de dolor, con los que abandonó el terreno de juego, en camilla y entre lágrimas. Su dolor fue el de todo su equipo, que se quedó frío ante la presumible gravedad de la lesión producida.
Nada más reanudarse el choque, a los treinta segundos, Isma disparó fuerte y su disparo fue repelido por Aceves, cuyo rechazo le cayó al recién ingresado Gorce, que con potencia puso el gol del empate. Con él, dio alas a su equipo, al que lideró en ataque, espoleado desde la grada por el ruidoso banquillo. Supuso toda una sorpresa, una revolución modesta que al Real Valladolid le costó aplacar.
La intensidad en la presión y la propuesta de llevar el partido al plano de las disputas intentó ser contrarrestada por Julio Baptista dando entrada a Isailovic, a fin de ganar presencia física frente a los tres centrales del Pinto. Salió bien, puesto que nada más salir remató un centro de Carrión y, poco más tarde, buscó de nuevo la puerta visitante. Entremedias, Adrián Álvarez también buscó el tanto, pero tampoco atinó.
Los pinteños tuvieron alguna tímida llegada, resuelta normalmente con tiros desde fuera del área, aunque Garce estuvo a punto de dar un disgusto tras una buena presión sobre la salida desde atrás. Un disparo que se marchó cerca del poste fue su última intentona, mientras que los cambios del Divi siguieron surtiendo cierto efecto: Canito remató fuera un centro de Diego Moreno tras su enésima galopada y el debutante Renato se encontró con el palo en la última ocasión clara.
El empate se acabó haciendo escaso y supone el primer tropiezo de los blanquivioletas en casa. Asimismo, permite a la Cultural y Deportiva Leonesa abrir un hueco de cinco puntos sobre los pucelanos, si bien tienen tres partidos más. Los de Baptista, que suman veinticuatro puntos, afrontarán en las próximas semanas calendario apretado, que comienza el viernes con la visita del Alcorcón, en el choque aplazado por COVID en su fecha natural.
Real Valladolid: Aceves; Fresneda (Canito, min. 74), Adrián Gómez, Torres, Diego Moreno; Iker González (Rayan, min. 74); Adrián Carrión (Renato, min. 74), Adrián Álvarez, Maroto, Popi (Arroyo, min. 42); y Abel Calleja (Isailovic, min. 56).
Atlético de Pinto: Pita; Merino, Felipe, Javi, Moure, Pani; Pirri (Alberto Moreno, min. 90), Juan, Ángel; Álvaro (Gorce, min. 46) e Isma (Mario Calle, min. 73).
Goles: 1-0, min. 10: Torres. 1-1, min. 46: Garce.
Árbitro: Carlos Cañibano Arias (colegio vallisoletano). Amonestó al local Maroto y a los visitantes Gorce, Moreno y Luis.
Incidencias: 15ª jornada de la División de Honor Juvenil Grupo V-B, disputada en Los Anexos a puerta cerrada.