El hecho de contestar a un Whatsapp o maquillarse en el coche es motivo de multas de hasta 200 euros. Sobre todo en el caso del parasol del coche, que se suele usar para ver nuestro aspecto, peinarnos o maquillarnos. Hoy en día, esto ocurre también con el teléfono, al que parece que tenemos que atender, incluso por Whatsapp, de forma inmediata. Todo esto hace que se den riesgos y distracciones que la DGT deja claras en su página web oficial. Vamos a ver cuáles son y cuáles son las multas por ellas.
La multa de 200 euros de la DGT
Las multas que puede poner la DGT por el hecho de mirarse en el espejo del coche, ya sea para maquillarse, peinarse o para ver el aspecto que se tiene, están más que justificadas por el organismo, ya que considera que un despiste en un momento en el que el semáforo se pone en verde, puede ocasionar un accidente.
Por eso pone multas de hasta 200 euros y es que también, en otros casos, esto se hace en carretera conduciendo, al igual que se puede contestar un Whatsapp o hablar por el móvil. Lo que hace que si se retira una mano del volante se esté perdiendo control sobre el coche, lo que también es muy peligroso. Es por eso que la DGT está aumentando sus controles en zonas urbanas y pone multas por estas razones.
Las distracciones para la DGT
La clasificación de la DGT en cuanto a los factores que pueden provocar multas, se divide en factores externos y factores internos. Sobre los factores externos dice que “facilitan que el conductor pierda su atención, por ejemplo: las vías que nos son muy familiares o que nos resultan monótonas, pues estas hacen que bajemos la guardia y no prestemos atención, una señalización excesiva, las situaciones que son ajenas al tráfico como la publicidad, el móvil o las propias de la conducción como pueden ser los accidentes, en los que solemos mirar a ver qué es lo que ha sucedido”. Lo que acabamos de ver estaría dentro de este grupo.
No obstante, también la DGT avisa de que algunas distracciones, provoquen o no multas, están causadas por factores internos. Ante estos, la DGT comenta que “entre las circunstancias personales del conductor tendríamos las propias capacidades del mismo, hay personas que se distraen con mayor facilidad que otras. El estado en el que se encuentre el conductor es un factor determinante, si tenemos sueño o sentimos fatiga nos es más difícil mantener la atención. El alcohol, las drogas y los medicamentos también son factores facilitadores”.
Otros peligros que pueden causar multas
La DGT también recalca peligros que pueden causar multas y, lo que es peor, accidentes graves o peligros a quienes están conduciendo y al resto de personas que están en carretera. El organismo destaca que “también tiene gran importancia el estado físico del conductor, que puede sufrir cambios durante la conducción, especialmente cuando ésta se prolonga en el tiempo” o dejar de prestar atención a la carretera o no ver un peligro que estaría requiriendo que tengamos que frenar o dar un volantazo.
La DGT recuerda que en este caso, lo que puede ser un peligro en la carretera además de provocar multas es que “el primer efecto de la velocidad y de las distracciones sobre la conducción es el aumento de la distancia de detención: Cuanto más rápidamente circules o permitas un despiste por pequeño que sea, más espacio recorrerás antes de que tu vehículo se detenga por completo o antes de que disminuyas la velocidad lo suficiente como para evitar el accidente”, una explicación del organismo que pretende que las personas sean conscientes de los peligros reales y no solo se preocupen por las multas.
 
			