Hay bebidas que son más hidratantes que el agua incluso. Aunque no dejemos de beber agua, porque es muy necesaria, podemos incluir estas bebidas en nuestro día a día para hacerle frente a esos días de tanto calor. Se trata del agua de coco natural y de algunas infusiones frías y la leche.
Vamos a ver más factores sobre la importancia de la hidratación y cómo estas bebidas pueden ayudarnos en situaciones extremas.
Electrolitos e hidratación
La experta Natalia Migdalova, especialista en Nutrición Clínica y Deportiva y fundadora de Migdal Nutrición, recalca que “la hidratación depende de la capacidad de un líquido para reponer agua y electrolitos en el organismo, así como de su retención a corto y largo plazo. El agua pura es el estándar de hidratación, ya que se absorbe rápidamente en el intestino y repone pérdidas de manera efectiva. Sin embargo, algunas bebidas pueden proporcionar una hidratación más sostenida debido a su composición”.
No obstante, hay bebidas que hidratan más que el agua y tal y como explica Natalia Migdalova, “los estudios científicos indican que bebidas que contienen pequeñas cantidades de carbohidratos —como los azúcares—, proteínas, grasas y electrolitos —principalmente el sodio— pueden retrasar el vaciamiento gástrico, lo que permite una absorción más gradual del agua y una retención prolongada en el cuerpo”.
El sodio, por otro lado, favorece que se retengan líquidos en el cuerpo. Esto es porque estimula la reabsorción en los riñones.
Las bebidas más hidratantes
Las bebidas que más calman la sed, según se ha descubierto, son aquellas que tienen propiedades que el agua no tiene. Por ejemplo, la leche, mantiene los líquidos mejor en el cuerpo por lo que es una de las bebidas que son aún más hidratantes que el agua. Las propiedades de la leche “multiplican los efectos que por ejemplo el agua tiene para mantener la hidratación”.
Después tenemos el agua de coco natural, que al ser una fuente rica en potasio y en menor medida en sodio y azúcares naturales, es una muy buena opción, aunque lo mejor es escoger las que no contengan azúcares añadidos.
Las infusiones sin teína serían otras de las bebidas que ayudan a la rehidratación en las actividades físicas moderadas. Aunque su capacidad e hidratación no es mucho mayor en algunos casos, son un buen complemento para quienes necesitan bebidas con sabores porque les cuesta beber tanta agua.
El agua con una pizca de sal también ayuda mucho y se le pueden añadir unas gotas de limón. Una de las bebidas más saludables y naturales que podemos beber en verano si no queremos recurrir a otras más azucaradas o menos saludables.
El caldo suave, también es una buena alternativa sobre todo para personas que tienen poco apetito o que necesitan hidratarse de forma urgente. También las isotónicas para deportistas.
Lo que dice la experta es que “contienen carbohidratos, generalmente un 6-8% de glucosa o fructosa, y electrolitos, caso del sodio y del potasio, que facilitan la absorción intestinal de agua mediante el cotransporte de sodio-glucosa y mejoran la retención de líquidos”.
La importancia del agua
Lo que también subraya la experta es que “es importante tener en cuenta que muchas bebidas isotónicas comerciales contienen azúcares añadidos en cantidades excesivas, hasta 20-30 g por 500 ml, lo que puede ser innecesario para personas sedentarias o en ejercicios de baja intensidad, aumentando el riesgo de consumo calórico excesivo. Por ello, su uso debe limitarse a contextos de actividad física”.
Y añade que aunque añadamos a nuestro cotidiano esas bebidas, el agua “sigue siendo la mejor opción en la mayoría de los casos. Aunque haya momentos en los que otras bebidas pueden ser más útiles para mantener un buen estado de hidratación”.
 
			