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El mar no siempre fue azul: un estudio desvela qué color tenía antes y cuál podría adoptar en el futuro

por Elena
1 de julio de 2025
El mar no siempre fue azul: un estudio desvela qué color tenía antes

El mar no siempre fue azul: un estudio desvela qué color tenía antes

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Desde que somos bien pequeños, cada vez que pensamos, imaginamos, describimos o dibujamos el mar, siempre se nos viene a la cabeza un color, de un tono más claro o más oscuro, más intenso o más pálido, pero siempre es el azul. Y es que es algo que incluso caracteriza a la Tierra, la cual desde el espacio es predominantemente de este color, motivo por el que se le apoda como “planeta azul”.

Sin embargo, esto no siempre ha sido así, ya que gracias a un estudio reciente se ha revelado que hace miles de millones de años, el mar era en realidad verde, y no se descarta que en el futuro pueda volverse púrpura o incluso rojo debido a cambios en su composición.

Este hallazgo tan sorprendente nos recuerda que el mar, lejos de ser un elemento inmutable, refleja las transformaciones químicas y biológicas del planeta y, por tanto, la idea de un mar púrpura no es tan descabellada como parece, y nos obliga a mirar con otros ojos su evolución.

Un mar verde en el pasado y cómo la gran oxidación lo cambió todo

Los expertos en oceanografía han puesto sobre la mesa que el mar, hace entre 3.800 y 1.800 millones de años, era de color verde, y la razón de ello era la altísima concentración de hierro disuelto en sus aguas. Ese hierro absorbía la luz azul, dejando que predominara el tono verdoso, a lo que hay que sumarle que la atmósfera carecía prácticamente de oxígeno, por lo que el mar tampoco albergaba la vida compleja que conocemos a día de hoy.

Todo este cambio no se dio del día a la mañana, sino que fue un proceso lento y enorme que se conoce como la Gran Oxidación y que transformó el mar completamente, algo que fue posible cuando las cianobacterias comenzaron a liberar oxígeno hace unos 2.400 millones de años. Esto hizo que el hierro se oxidara además de volverse insoluble, lo que hizo que desapareciera poco a poco de las aguas y permitió que la luz azul entrara en estas zonas con mayor intensidad.

Pero aunque podamos pensar que este cambio fue solo estético, lo cierto es que se transformaron ecosistemas completos y fue posible que se expandieran formas de vida mucho más evolucionadas de las que había hasta entonces, algo que nos permitió a los seres humanos existir como especie.

¿Y de qué color será en el futuro?

Y al igual que en el pasado, el mar cambió de color, los científicos han encontrados pruebas que respaldan que en el futuro podría estar teñido de otro color, ya que hay determinadas zonas costeras donde se ha podido observar la proliferación de bacterias sulfúreas que pueden prosperar perfectamente en aguas con bajo nivel de oxígeno. Para ello, estas bacterias producen pigmentos púrpura que les ayudan a captar mejor la luz, lo que les permite sobrevivir en dicho entornos.

A todo lo anterior hay que sumarle la acidificación de las aguas y el calentamiento global, factores que podrían hacer que estas bacterias se extendieran, dando lugar a mares de un tono tirando a violeta que ya podemos observar claramente en algunos puntos de nuestro planeta.

Si esto ya nos parece una auténtica locura, podemos encontrar ciertos fenómenos como las mareas rojas, las cuales están provocadas por ciertas microalgas y que cambian el color de las aguas estacionalmente. También nos encontramos con que las aguas de los océanos se han vuelto un poco más verdosas en los últimos 20 años gracias al aumento del fitoplancton, tal y como han demostrado otros estudios recientes y que tiene mucho que ver con el aumento de las temperaturas, entre otros factores.

La realidad que nos muestra todo esto es que fijarnos en el color del agua del mar nos puede dar mucha información sobre cómo se encuentra nuestro entorno, funcionando casi como una especie de termómetro ecológico. Por ejemplo, en lugares como la isla japonesa de Iwo Jima actualmente nos encontramos con laboratorios naturales en los cuales se puede observar cómo se comporta el mar en condiciones tan extremas de temperatura y volcanismo.

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