Seguro que muchos de nosotros solo usamos Google Maps para orientarnos, buscar la mejor ruta a un destino o cuánto se tarda en llegar al lugar que hayamos buscado, pero quizás no sabes que incluso nos permite mirar al pasado, como si de una máquina del tiempo se tratara. Pero tú tranquilo, que no estamos hablando de ningún truco complicado que solo tienen algunas versiones concretas, sino que es una herramienta que lleva integrada en esta app desde hace años y que ha pasado muy desapercibida. Al menos hasta ahora.
Esta posibilidad de viajar al pasado es gracias a Google Street View, una función de Google Maps que, aunque lleva con nosotros desde 2007, ha ido ganando valor emocional con el tiempo, ya que no solo nos muestra cómo están las calles hoy, sino que permite acceder a imágenes de años anteriores y ver cómo era ese mismo lugar entonces. Es, literalmente, como una cápsula del tiempo que todos llevamos en nuestros bolsos o bolsillos.
Google Maps te permite ver imágenes antiguas
Para acceder a estas imágenes históricas, solo hay que introducir una dirección en Google Maps, activar el Street View y, una vez dentro, solo tienes que hacer clic o tocar en la opción de “Ver más fechas”. Así, se despliegan las distintas veces que el coche de Google pasó por ese punto concreto, pudiendo ver de este modo la evolución de un lugar concreto. Desde una fachada sin reformar hasta un negocio que ya no existe, cada foto nos cuenta su historia.
Lo más sorprendente es cuando esa historia se cruza con la nuestra, algo que le pasó a David Rodríguez, divulgador en redes, que se topó con una imagen de su padre fallecido mientras revisaba su antiguo barrio. Lo reconoció fácilmente: calvo, como siempre, en la puerta de su antiguo trabajo en Madrid. Lo compartió con su madre, que se emocionó al ver aquella escena cotidiana atrapada en el tiempo de tal modo que Google Maps, sin quererlo, le había devuelto un recuerdo.
Google Maps y los recuerdos que no esperabas encontrar
Pero es que este caso no es único, ya que Nacho Mira se encontró con un viejo conocido: a él mismo de pequeño en casa de sus abuelos, más o menos cuando contaba con 10 añitos, y apoyado en la persiana sin saber que estaba pasando un coche en ese momento que lo dejaría inmortalizado para siempre en esa plataforma. Un bonito recuerdo que conservar ya que, por desgracia, a día de hoy sus abuelos ya no se encuentran entre nosotros y esa casa ya se ha vendido; aunque, gracias a Google Maps, puede recordar esa época cada vez que quiera.
Como podemos con estos dos emotivos ejemplos, Google Maps nos puede servir no solo como algo funcional, sino que también puede ser una puerta a ciertos momentos pasados que ya ni recordamos o que no éramos conscientes de que estaban ahí.
Cómo hace Google Maps estas imágenes
Para hacer estas fotos, Google Maps utiliza coches equipados con cámaras 360º que recorren las calles y, en zonas inaccesibles, se usan bicicletas, mochilas o incluso mulas; aunque también es posible que los usuarios colaboren, pero en estos casos se necesita un equipo profesional y saber cómo utilizarlo. Es necesario señalar que no todas las calles están disponibles, ya que en pueblos pequeños o zonas poco transitadas, puede que no existan imágenes o que solo haya un par de ellas.
Otro punto a tener en cuenta es que, por motivos de privacidad, en Google Maps las caras y las matrículas aparecen pixeladas, ya que en Europa se exige este tipo de protección mientras que otros países.
 
			