Diego Barcala, director de esta publicación, abrió el ciclo #FútbolSinGritos desgranando distintos proyectos emprendidos por su medio para demostrar “que el fútbol sirve para algo”

Queriendo o sin querer, la Revista Líbero se ha erigido en adalid de un periodismo nuevo y viejo, de una forma de hacer las cosas que se aleja de algún modo de la inmediatez y los gritos del fútbol y, nostálgica, prefiere los ecos pausados del después.
El director de la citada publicación, Diego Barcala, abrió el ciclo de conferencias #FútbolSinGritos, organizado por el Colectivo Laika en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valladolid, para, en su exposición, explicar el modo que Líbero ha encontrado de intentar demostrar, en sus propias palabras, que “el fútbol sirve para algo”.
La revista trata que “el fútbol tenga una utilidad social” mostrando su propio compromiso en sus páginas y a través de distintas campañas emprendidas desde su creación. Así, por ejemplo, en su Número 3 –cuya portada se adjunta a la derecha– entrevistaron a Frédéric Kanouté, musulmán y por entonces jugador del Sevilla CF, para explicar cómo se había adaptado a una ciudad con tantos condicionantes religiosos como es sevillana.
En este intento de “sacar al futbolista del mundo de ignorancia que les rodea” han conseguido que sean ya varios los jugadores que han firmado en sus páginas y permitir que todos los que pasan por ellas desmitifiquen esa leyenda. Aunque van más allá. En una acertada práctica de periodismo comprometido, sensibilizados con los bombardeos en la franja de Gaza, la venta de cada Número 3 va destinada a UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina en Oriente Próximo.
Recientemente, ha vuelto a salir a la palestra una parte de dicha entrevista con Kanouté, después de los atentados perpetrados en París. “Reprodujimos lo que decía sobre el Islam, una obviedad, pero que tuvo mucho interés. Este enfoque nos ha dado más popularidad, dando a entender que estamos en lo cierto cuando creemos que el fútbol es buen canalizador de mensajes sociales”, explica Barcala.
Siendo, así, teniendo en cuenta que “el fútbol transmite con mayor facilidad que cualquier otro medio los mensajes, ¿por qué no intentar aprovechar esto para otros fines sociales?”. En Líbero, como se ha dicho, están en ello. También, con reportajes como el realizado con refugiados sirios en Hamburgo o con un equipo de Jerusalén que es el único con niños árabes e israelíes y con sección femenina en categorías inferiores.

con motivo de ‘Fútbol vs Alzheimer’
Fútbol vs Alzheimer
Se ha podido percibir ya que Líbero es una publicación diferente. Distinta por su ritmo pausado, el de un ‘diez’ de la escuela argentina; comprometida como un ‘cinco’. Y que rasca como un central italiano, buscando llegar más allá del mero grito del gol, el orgasmo último –valga la redundancia– del balompié.
En ese ‘rascar’, ha colaborado con la Universidad Autónoma de Barcelona el desarrollo de un proyecto que lleva por nombre ‘Fútbol vs Alzheimer’, similar a otro llevado a cabo en Estados Unidos con aficionados al béisbol y en el que se convirtió a este deporte en un canal alternativo para encontrar conexiones emotivas entre familiares y pacientes de esta enfermedad.
La manera de ayudar de Líbero ha sido a través de la creación de diversos contenidos que logran reavivar la memoria y permiten “momentos de lucidez” con “cosas insospechadas como recordar una alineación de un equipo de hace cuarenta años”. He aquí el vídeo que promociona el proyecto:
[embedyt] http://www.youtube.com/watch?v=NlOtryW8QTw[/embedyt]
La iniciativa no acaba ahí. A través de su página web han solicitado donaciones para poder imprimir estas revistas y enviarlas a todos los centros de Alzheimer de España. Asimismo, la intención es crear un apartado en el mismo portal a través del cual cualquier familiar pueda personalizar la suya propia para ‘trabajar’ así con sus allegados.
“Hemos recibido muchas preguntas de gente interesada en comprar estas revistas, pero sobre todo, historias de gente a la que le ha llegado muy de cerca. Nos ha llegado mucho el caso de un nieto que nos contó por correo electrónico que le canta la primera estrofa del himno del Atleti a su abuela y ella lo termina. Resulta realmente emocionante. Y seguiremos con este proyecto”, reconoce Diego Barcala.
Otros proyectos y reivindicaciones

Esta revista trata de unir a diferentes agentes sociales en torno al mundo del balompié. Así, apunta “a futbolistas, para que hablen de cosas sociales, o al revés; hacia gente con un perfil más serio, artístico o cultural, a la que ponemos a hablar de fútbol”.
Ha sido el caso, por ejemplo, de músicos como Quique González, de escritores como Luis García Montero –hoy colaborador, al igual que Guille Galván, componente de Vetusta Morla–, de gente de otras artes como el cineasta David Trueba o incluso de Luis de Guindos, ministro de economía.
“Como aficionados al fútbol nos daba especial rabia que toda la información relacionada con el fútbol estuviese en manos de gente poco interesada en la cultura y que toda esa gente de la cultura no estuviese especialmente interesada en el fútbol por no querer desprestigiar su nombre por mostrar ese interés”, explica el director de Líbero, si bien, agrega: “Esta tendencia está cambiando en los últimos años”. Por suerte.
A través de sus diferentes canales, este medio de comunicación realiza otro tipo de reivindicaciones sociales, como por ejemplo la defensa de la libertad de expresión de los actores del fútbol o la repulsa ante la violencia en el balompié. Asimismo, ha estado también en boga por otras campañas como ‘Si te lo explican con fútbol lo entiendes’, desarrollada por la agencia de publicidad LOLA, y que ha recibido innumerables premios nacionales e internacionales.
Esta, reconoce Diego Barcala, les ha permitido adentrarse con fuerza en el mercado latinoamericano, logrando un buen número de suscripciones en países como México o Argentina. Barcala aprovechó, también, para lanzar una primicia: próximamente Líbero lanzará un libro bajo el título de ‘Mi futuro crack’ con argumentos a favor o en contra de la elección de un buen número de nombres de futbolistas.
Seguirá así, con esta publicación, fortaleciendo una marca hoy ya fácil de identificar, reconocida por su manera propia de hacer las cosas. Propia, socialmente comprometida… y de gran calidad.
