El Real Valladolid Promesas buscará afianzar su sensación de estar salvado logrando la quinta victoria consecutiva en el campo del Izarra
Con quince puntos por jugarse y once de ventaja sobre el descenso, la permanencia del Real Valladolid Promesas en la Segunda División B no es matemática, pero existe la sensación, creencia incluso, de que con las 44 unidades que tiene bastará. No obstante, los pupilos de Borja Jiménez querrán seguir con el buen hacer reciente ampliando la racha de cuatro victorias consecutivas frente a un rival, el Izarra, al que se superaría en la tabla en caso de conseguir la quinta.
El técnico abulense lo dijo en la rueda de prensa posterior al triunfo frente al Peña Sport: aunque sea poco, todavía queda. Y si bien lo que sus chicos palpan, como así se ha reflejado en los entrenamientos de la semana, es que no hay urgencias, aún quedan ganas. De hacer las cosas bien; de seguir haciendo las cosas bien para conseguir quién sabe qué. Una mejor clasificación. Un sitio a corto o medio plazo en el primer equipo quizá.
No se desdeña el partido, Jiménez no se reserva nada. Aunque no es descabellado pensar que en algún instante pueda asomar algún juvenil, con las miras puestas ya en la próxima temporada, viaja a Navarra con todo lo que tiene, y si entra Rubén es por las bajas en la parcela defensiva.
Un problema en el psoas ha descartado a Cristian, y los enésimos problemas físicos de Ángel le llevan a quedarse fuera otra vez, como en tantos y tantos envites este curso. Asimismo, Deve todavía no se ha recuperado, como Corral, que si bien ha sido más un efectivo del División de Honor, llegados a este punto podría haber encontrado un hueco. Anuar, mientras tanto, será baja debido a que cumplirá ciclo de amonestaciones.
Después de ayudar a certificar matemáticamente el quinto puesto del División de Honor, tras superar también una sanción de dos partidos, Mayoral retorna a una lista en la que, junto a él y Rubén, estará un tercer juvenil, como Mayo, más conocido en el hábitat del Promesas: Dani Vega. La otra novedad es la vuelta de Julio, toda vez que se ha recuperado de un fuerte golpe en la cadera producido entrenando hace dos semanas. José, quien cumplió ciclo de sanción ante el Peña, estará de nuevo disponible.
A expensas de ver qué sucede en el arco, si se da continuidad a Dani Hernández o vuelve Julio, es de esperar que la línea defensiva la conformen los cuatro ‘naturales’: Arroyo, Casado, Porcar y Royo. La vacante de Anuar en el doble pivote la podría cubrir Mario Robles, mientras que el resto del once podría ser el ya habitual.
En todo caso la lista de dieciséis convocados que se desplazarán a tierras navarras la completan los siguientes jugadores: Julio, Dani Hernández, Arroyo, Mario Robles, Iván Casado, Royo, Nacho Porcar, Rubén, Juliá, Renzo Zambrano, Toni, José, Mayoral, Higinio, Caye Quintana y Dani Vega.
El rival, el CD Izarra, camina tranquilo con el objetivo de la permanencia sellado, con 46 puntos y en la décima posición. Una vez conseguida la salvación, sueña con acabar la temporada entre los seis primeros y clasificarse para la Copa del Rey, por lo que cabe esperar que no sea el partido de esos típicos de post-temporada, de la basura.
Para ello, y para que el equipo se sienta arropado en la lucha por este objetivo, la entidad ha decidido regalar una entrada a cada abonado para que un invitado acceda con él a Merkatondoa, un campo en el que los navarros han conseguido nueve de sus doce victorias, además de cinco empates, y solo tres derrotas.
Asimismo, el Izarra ha marcado catorce goles en casa, pero solo ha encajado tres, una estadística que habla del buen hacer del conjunto que dirige Sergio Amatriain frente a su afición. Con la única baja confirmada del centrocampista Pablo Lizarraga, Borja Jiménez y los suyos deberán esperar todavía a conocer la lista definitiva del técnico de Estella.