El jienense terminaba contrato con el Real Valladolid este treinta de junio y no amplía una temporada más, que dependía de su rendimiento

Manu del Moral llegó a Valladolid a finales de agosto del año pasado. Sin duda alguna, fue una sorpresa para toda la afición blanquivioleta. Un jugador de las características de Manu del Moral, internacional absoluto en su día, no pasa desapercibido y se le contrató con la idea de que fuera uno de los pesos pesados de un equipo liderado por Garitano y configurado para lograr el ascenso.
En primera instancia, el mediapunta y el Real Valladolid se comprometieron por la temporada que ha acabado recientemente, lo que implica que el contrato finaliza este mismo treinta de junio. No obstante, la dirección deportiva se reservaba la posibilidad de ampliar una campaña más este vínculo en función del rendimiento de Manu del Moral en la 2015/16.
Al final, esto no se ha llevado a cabo, por lo que el futbolista andaluz ha hecho sus maletas y se marcha de la entidad blanquivioleta, aunque para irse no muy lejos. Manu del Moral será jugador del Numancia las dos próximas campañas, tal y como ha anunciado la entidad soriana este mismo miércoles.
Su paso por el equipo de la capital castellano y leonesa se ha visto marcado por las lesiones. Sobre todo, la que sufrió en Zaragoza en noviembre que le relegó a la enfermería algo más de dos meses cuando pasaba por su mejor pico de forma; así como la sufrida en marzo que le obligó a llevar durante un tiempo una máscara por un golpe en la cara. Eso, unido a que no siempre ha jugado en su posición natural –la de mediapunta–, ha acabado afectando a su rendimiento y no ha podido demostrar todo el fútbol que todavía guardan sus piernas.
Manu del Moral ha disputado veinticinco partidos, de los cuales ha actuado como titular en diecinueve y en los seis restantes ha salido como revulsivo en la segunda parte. En total, ha vestido la blanquivioleta 1.511 minutos. Durante ese tiempo, ha marcado tres goles, por lo que la media ha sido de un tanto cada 503.7 minutos. Por su parte, en el apartado de disciplina, ha recibido un total de 34 faltas por las dieciséis que ha cometido y tan solo ha visto dos tarjetas amarillas.
Más allá de sus números, el jienense fue uno de los jugadores que ante los medios de comunicación hablaba sin tapujos sobre cómo iba la temporada. No dudó en dar la cara en ningún momento, sobre todo en los más complicados, como las destituciones de Gaizka Garitano y Miguel Ángel Portugal. Ahora, buscará más fortuna en Soria, donde intentará tener más regularidad y encontrar un sitio que espera que no se vea privado por las lesiones.
