El club lagunero hace gala del respeto al colectivo arbitral enseñando una lección a uno de sus jugadores, y por extensión, al resto de sus futbolistas
A menudo distintos agentes implicados de uno u otro modo en el fútbol base afirman que esta perdiendo el cariz formativo con el que nace y que debiera tener. Quizá en esta afirmación haya parte de razón, ya que a veces de los padres se deriva la perversa creencia de que mientras está en manos del entrenador es problema de otro, o cuanto menos me tienen entretenido al chico, mientras que de la otra parte hay quien cree que la educación pasa solo por lo que el niño vive en casa o que no puede o no debe entrar en ese apartado.
No es el caso del CD Laguna, club que ha aprovechado una conducta incorrecta de uno de sus jugadores de fútbol 7 para darle la vuelta a la situación y convertirla en un ejemplo de educación. Después de que este futbolista fuera expulsado en uno de sus últimos encuentros por faltar respeto al colegiado, ha impuesto al menor, con mucho dolor de su corazón, una sanción superior a la recibida por parte de la Federación de Castilla y León de Fútbol.
Así lo ha explicado Miguel Ángel Carrasco, uno de sus coordinadores, en la tarde de este lunes en #HacemosCantera:
“No es agradable [castigar a un jugador]. Estamos para que jueguen al fútbol, pero también para ayudar en su educación y formación. El fútbol tiene unas reglas y el CD Laguna también, que deben ser respetadas por todos. Hemos encontrado la colaboración del jugador y de la familia, han acatado lo que hemos decidido desde el punto de vista social y deportivo. Se ha convertido en un ejemplo ante sus compañeros, digno de ser destacado por cómo se lo ha tomado.
Carrasco reiteró que aunque “no es plato de buen gusto” tener que actuar sancionando a un jugador, no podían “dejar pasar esta oportunidad” de actuar “de una manera ejemplar”. “Hay normas que son para todos, y con ellas debemos mantenernos firmes. Aunque la colaboración y la asunción del problema fue correcta desde el primer momento”, cuenta, antes de agregar que la sanción deportiva “ha sido mayor” que la impuesta por la FCyLF, lo cual no ha sido un problema.
“Le pedimos que fuera un ejemplo social ante sus compañeros. Creemos que esto es algo que puede servir para su educación, que de eso se trata. Nos gusta destacar con resultados deportivos, pero también formar en valores y en educación, cuestiones que deben venir desde casa, pero también desde otros ámbitos como el nuestro. Desde el primer momento tanto él como la familia se mostraron arrepentidos y la colaboración fue máxima”, explicó.
Y así, de igual modo que el menor se debe convertir en un ejemplo con esa asunción de su error y de las consecuencias que ha traído, también lo han de ser los familiares, que no han injerido ni actuado de manera negativa en respuesta a una actitud positiva por parte del CD Laguna. En el fondo –o no tanto–, no solo están obrando por el bien del club y del fútbol; también por el del chico, que seguro que volverá siendo mejor, sino jugador, por lo menos persona.
Escucha la entrevista completa haciendo clic debajo (a partir del 40:34):
