El entrenador del CD Parquesol reconoce que el triunfo ante el Amigos del Duero fue “sufrido”, porque su equipo no fue capaz de cerrarlo, aunque cree que dominaron “el juego, el balón, los espacios y las ocasiones”

El semblante de Óscar González era de alivio después de que ‘su’ CD Parquesol venciera al Amigos del Duero este domingo en el José Luis Saso. Alivio porque tocó “sufrir” hasta el final debido a que las naranjas no fueron capaces de “cerrar” el choque. Aunque a la vez reflejaba satisfacción porque “cualquiera que haya visto el partido ve que estuvo controlado” y que dominaron “el juego, el balón, los espacios y las ocasiones”. El único pero, ese: “Que cuando tienes ocasiones y no las metes te toca remar y sufrir hasta el final”.
Con todo, dijo estar “muy contento”, y no es para menos. Su equipo demostró un carácter “aguerrido” y, aunque no pudo sellar el triunfo con un tercer gol, “trabajó con fiereza y sin ningún atisbo de dejar escapar la victoria”, cortando rápido cada intentona zamorana. “Esa fiereza no la hemos tenido en las diez jornadas anteriores. Con el empate y con el resultado a favor la hemos demostrado. Estamos contentos; era necesario”, manifestó.
Sin duda lo era, porque enfrente estaba el rival que les sucedía en la clasificación, que llegaba a Valladolid como enemigo principal por la cuarta posición (llegó a un punto y se fue a cuatro).
“Era un partido trascendental; nos lo planteamos como una final. Hemos tenido sesión de vídeo, teníamos todas las acciones estudiadas, el juego a balón parado… Incluso ha sido uno de esos días en los que aprovechamos para incluir un vídeo motivacional. Estaban marcadas y con ganas por el resultado que tuvimos en Guadalajara y porque el rival era quinto”, arguyó González.
Con todo, no se mostró preocupado por las oportunidades marradas, ya que sin ellas “sería distinto” y no es algo que suela suceder. Además, es algo que le ha pasado al Atlético Féminas B, por ejemplo, en su empate a dos contra el Guadamur. Lejos de mostrar malestar, explicó que le gustó su equipo también en este apartado, en lo concerniente a la producción ofensiva.
Pese a la sensación de peligro, más latente que patente, atrás las naranjas no sufrieron demasiado, a pesar de que Nata se vio obligada a actuar como central. No pesaron las bajas en esa parcela, en la que el técnico parquesolino espera ir recuperando jugadoras. “Rivas está completamente recuperada y dentro de nada, en cuanto acabe la primera vuelta, ansiamos poder contar con Maka. A Villafáfila le queda una semana de readaptación y Lore se va recuperando poco a poco. Las que están, están cumpliendo, y las que vendrán, sumarán“, dijo tajante González.
Por último, no quiso detenerse demasiado a valorar el parón, ya que considera que sus jugadoras están capacitadas y con el ánimo de competir “si hace falta dentro de dos días”. “Estamos compitiendo y haciendo las cosas bien, pero nos da igual, no nos va a afectar. Después del parón tendremos otra semana complicada, con tres partidos en siete días, pero tenemos el precedente de la anterior ocasión en la que eso sucedió para prepararla (entonces sumaron siete de nueve). Primero de todo, estamos concienciados en sacar seis puntos para cerrar la primera vuelta“, concluyó.
