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El Parquesol pone fin a su maldición con una remontada ‘express’

por Juan Díez
12 de febrero de 2017
Foto: Juan Díez

Foto: Juan Díez

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Tras cuatro partidos sin ganar, las naranjas dan la vuelta a una desventaja de dos goles con una segunda parte en la que rozaron la perfección

 

Nata Alexia Parquesol
Nata y Alexia || Foto: Jesús Domínguez

En un momento de lucidez, uno de los muchos que tiene, el entrenador argentino Jorge Valdano afirmó un día que el fútbol es un estado de ánimo. Sería imposible explicar lo que este domingo ha sufrido, o mejor dicho disfrutado, el Parquesol, sin esa afirmación. Cómo un equipo que llevaba cuatro partidos sin ganar y que a falta de 43 minutos perdía por dos goles a cero, fuera de casa y en un campo embarrado, se va con los tres puntos en el bolsillo y con una cuarta posición más afianzada que nunca tan solo puede explicarse así, a través de los estados de ánimo que gobiernan el balompié.

Pero no nos engañemos. El Parquesol, lejos de frases o lemas, mereció ganar. Todo lo que no hubiera sido sumar tres puntos este domingo habría sido injusto. Óscar González decía hace unas semanas que su equipo no merecía llevar solamente dos puntos en lo que iba de año. Seguro que si ante el Olímpico de Madrid las parquesolinas no ganaban y se mantenía esa cifra de unidades, la palabra “inmerecido” ya se habría quedado corta.

Pero para llegar al gol de Alexia, que supuso el tres a dos y, por tanto, la victoria del Parquesol, las naranjas tuvieron que esquivar varios baches. En concreto dos. El primero, a los dos minutos, cuando Esther remató a la red un saque de esquina que se convirtió en el primer gol del Olímpico. Al igual que ocurrió hace dos semanas antes ante el Rayo B, las parquesolinas empezaban el encuentro por debajo en el marcador.

El segundo socavón resultó un calco al primero. También a los dos minutos, pero de la segunda parte, y también a balón parado, aunque en esta ocasión de falta directa, obra de Lidia. Y entre medias se vio a un Parquesol intenso, con llegadas, como un mano a mano de Ali que salvó Nagore, la portera del Olímpico, pero también las madrieñas dispusieron de opciones, como la que estrellaron en el poste al filo del descanso.

La situación no podría ser más dramática: encajar un gol nada más empezar el partido y otro al comenzar el segundo acto, con esa ‘ansiedad’ de ganar tras cuatro partidos sin hacerlo y con un campo lleno de charcos en el que difícilmente se podía practicar buen fútbol. Remontar se antojaba cosa mayor.

O eso parecía. Pero el fútbol tiene algo que lo diferencia de los demás deportes: se vive de momentos. Y el gol que marcó Nata tras un saque de esquina fue el preludio de ese cambio en el estado de ánimo de las vallisoletanas. Se pasó de una imposible a una “más que probable” remontada y todo gracias a un tanto. A partir de ahí y hasta que el árbitro pitara el final del encuentro, el Parquesol empezó a desplegar ese fútbol que últimamente había surgido a cuentagotas, pero que en esta ocasión se transformó en goles y, lo más importante, en un triunfo.

Nata también sería la encargada de poner las tablas. Pero más allá de su doblete, el partido de la centrocampista fue para enmarcar. No dio un balón por perdido, se atrevió a pisar área en numerosas ocasiones y su garra condujo al equipo a obtener esos tres puntos. Aunque, eso sí, el tercer y definitivo tanto no fue obra suya, sino de Alexia, que en la segunda parte volvió a mostrar su mejor versión, algo que no hacía desde antes de su lesión.

El Olímpico apenas reaccionó. El único peligro surgía a balón parado. Quizá ese sea el único ‘pero’ que se le puede poner a las naranjas. Esa inquietud que se creó cada vez que las madrileñas botaban una falta o un córner. Lejos de eso, Martina tuvo poco trabajo a mayores de los goles y los tres puntos volaron a Valladolid.

Un resultado magnífico que, sumado a las derrotas de Dinamo Guadalajara, Rayo B y Amigos del Duero, lo convierten en óptimo, ya que sacan ya seis puntos a las quintas clasificadas –el Dinamo–. Pero las naranjas, con este triunfo, sacan a limpio algo todavía más importante: el fútbol es un estado mental. Un momento –en este caso un gol– lo cambia todo. Porque casi con toda certeza, tras el primer gol del Parquesol, ninguna jugadora naranja desconfiaba de la remontada. Y la fe mueve montañas.

La próxima semana, el Tacón visitará el José Luis Saso para medirse a un Parquesol repleto de moral, deseando que el estado de ánimo de las naranjas se rebaje. Tarea difícil.

Olímpico de Madrid: Nagore; Esther, Lidia, Budía, Ludy; Susana, Platón, Tere, Lucía; Andrea (Mariana, min. 55), Nuria.

CD Parquesol: Martina; Crispi, Paula, Rivas, Kela (Nuria, min. 89); Nata, Barbi, Paula Martín (Judy, min. 61), Alexia; Paulita Román, Ali (Villafáfila, min. 86).

Goles: 1-0, minuto 2: Esther; 2-0, minuto 47: Lidia; 2-1, minuto 61: Nata; 2-2, min. 73: Nata; 2-3, min. 81: Alexia.

Árbitro: Ignacio Ferrero Melchor. Mostró tarjeta amarilla a la jugadora local Tere, y a dos jugadoras visitantes: Rivas y Barbi.

Incidencias: Partido correspondiente a la Jornada 18 del Grupo V de Segunda Femenina. Alrededor de cincuenta personas en el Estadio Municipal de Vicálvaro, en una tarde desapacible en el barrio madrileño.

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