El ceutí muestra una “alegría inmensa” después de sellar su renovación con el Real Valladolid hasta 2019. El próximo año, según sus propias palabras, será jugador de la primera plantilla “a todos los efectos”
Una vez este jueves se hizo oficial su renovación por dos próximas temporadas con el Real Valladolid, hoy viernes era el momento de escuchar a Anuar Mohamed Tuhami. Su cara lo decía todo, reflejaba la satisfacción de un objetivo cumplido, pero por si hubiera alguna duda, aclaró sus sentimientos por medio de la palabra: “Siento una alegría inmensa. Desde que llegué con trece años mi sueño ha sido llegar al primer equipo. Ahora que se ha dado ese paso siento un alivio muy grande, porque es por lo que he luchado siempre”.
Porque, como él mismo desveló, aunque afrontará su último año como futbolista sub 23, la próxima campaña será “jugador de la primera plantilla a todos los efectos”. El ser menor de esa edad le permitirá, en todo caso, que haya una alternancia con el filial, como en la presente temporada. Ahora bien, cuando cumpla diez partidos no habrá vuelta de hoja o, si no los jugara, no la habría en la 2018/19.
El ceutí reconoció que no fue “para nada difícil” llegar a un acuerdo, puesto que “el club puso muchísimo interés desde el primer momento y él “siempre” ha querido “defender estos colores”. “En el momento en el que hubo un contacto con mi representante lo vi con buenos ojos. En ningún momento hubo dudas”, aseveró.
Lejos de pensar que podría existir cierto malestar por no haber jugado más que dos partidos a las órdenes de Paco Herrera, se certificó (como si hiciera falta) que su compromiso con el filial es total. Aunque le apenó no poder jugar la vuelta de la eliminatoria copera contra la Real Sociedad por mor de una lesión –producida en el encuentro ante el Somozas–, sabe cuál es su lugar.
“Mi objetivo este año era jugar bien con el filial y hacer un gran año, y lo estamos consiguiendo. En el primer equipo hay mucha competencia y buenos jugadores; toca esperar el momento. Cada vez que Paco [Herrera] me ha subido he intentado hacerlo lo mejor posible. Si quiere volver a hacerlo solo tiene que llamarme, yo me veo capacitado”, ponderó.
A su modo de ver, este año ha “mejorado cosas” en su juego y ha dado “un pasito adelante“, que atribuye en parte a Rubén Albés, como ya hizo días atrás en #HacemosCantera. “En el filial hay un grupo muy bueno y un entrenador que nos entiende, que entiende las características de cada jugador y que hace que lo plasmemos sobre el campo. Hay un grupo competitivo, muy unido, y Rubén [Albés] tiene que ver mucho con eso”, explicó.
“Sin ninguna duda”, cree, “en el Promesas hay mucho talento y ganas de hacerlo bien” y jugadores que “podrían dar mucho” a un Real Valladolid en el que el ambiente que se respira es de confianza en la cantera. El ceutí confirmó que es “muy importante para los jugadores de abajo” que si destacan haya un entrenador “que dé un empujón” y citó el ejemplo de José como tipo.
Volviendo a su situación personal, aseguró que Paco Herrera “siempre” le ha dado “ánimos” y ha intentado “corregir algunos aspectos” en los que cree que debe mejorar. “Me ha muchísima confianza y siento que me valora y cuenta conmigo”, algo que minutos después se comprobó en la rueda de prensa del míster.
“Me alegro mucho de que se haya tomado la decisión, porque se lo merece en todos los sentidos. Cuando me han consultado he apoyado la decisión, porque creo que es un jugador que el año que viene, esté quien esté, debe contar con la misma confianza que yo pedí para José en pretemporada, sin la excusa de que puede jugar abajo y se puede echar mano de él”, afirmó el pacense.
Anuar, desde luego, tiene claras sus metas. Su mente “siempre ha sido estar en el Real Valladolid” y así se lo hizo saber a su representante. “Aquí me he criado y aquí he crecido. Yo lo tengo clarísimo: quiero triunfar aquí. Ojalá algún día pueda ser un referente, un jugador que los chicos vean como una referencia porque he salido desde abajo. Me haría mucha ilusión”, concluyó, tras recordar el referente que fue para él Álvaro Rubio.