El Real Valladolid Promesas afronta en Pasarón ante el Pontevedra CF un partido que, de ganar, le permitiría volver a meterse en la pelea por el play-off

Como contagiado por sus mayores, el Real Valladolid B lleva varias semanas instalado en la teoría del casi. Merecer correr mejor suerte no ha sido suficiente y suma un punto de doce. Eso sí, a los pupilos de Rubén Albés no se les puede achacar nada relativo con la intención o la intensidad: nunca ha dejado de querer y creer. Quizá, simplemente, esté dando su justa medida.
En esta reciente racha se ha enfrentado a dos de los tres primeros, Real Racing Club y Real Club Celta B. Y ante los dos hizo méritos para conseguir un botín mayor que el logrado (un empate y una derrota), aunque lo incontrolable le fue esquivo. Porque fútbol es caos e imprevisibilidad, y no solamente una lucha de voluntades, tal y como demostró el postrero gol celtiña el pasado fin de semana.
Su entrenador lo advirtió en la rueda de prensa posterior a la quinta derrota seguida fuera de casa, acontecida en La Nueva Balastera de Palencia: Pasarón, estadio del Pontevedra CF, cuarto clasificado, puede ser el escenario ideal para revertir la situación, no solo como foráneo, sino ya, también, la dinámica general actual. De ganar allí, el filial, además, se volverá a meter en la pugna por el play-off de ascenso, aunque mero acicate, pelea bonita.
No será sencillo por la suma de momentos de los blanquivioletas y porque el conjunto granate es el tercer mejor local, puesto hipotético al que ha caído después de perder ante el mejor fuera, el Racing, y ante el Celta B, que le endosó un duro cero a cuatro. Pese a estos resultados, la empresa es complicada porque llegó a encadenar nueve victorias seguidas ante su público.
Por si esto fuera poco, será el primer partido sin Mayoral, uno de sus referentes y que ha sido cedido al UCAM Murcia hasta final de temporada. El atacante abulense seguirá su formación en el conjunto universitario y en Segunda División con el objetivo de que esta primera experiencia en la Liga de Fútbol Profesional le sirva para seguir creciendo y retornar directamente como integrante del primer plantel.
No obstante, y aunque él mismo dijo en su despedida en #HacemosCantera que “el equipo está capacitado” para continuar con su buen trabajo, como ya se demostró en anteriores ocasiones en las que estuvo ausente, no cabe duda de que se trata de una baja que reducirá el espectro competitivo de un filial en el que otros jugadores deberán dar un paso adelante.
Porque no hay contratiempo que no se presente como una oportunidad, futbolistas como Iván Martín o Dani Vega tienen frente a ellos la posibilidad de crecer, no solo en cuanto a minutos jugados, sino también en su incidencia en el equipo, hasta ahora escasa. Así, sin sitio en el once en las últimas fechas, cabe la posibilidad de que sea uno de ellos dos quien acompañe a Higinio en el puesto que hasta ahora ocupaba ‘El Jabalí’.
Asimismo, lo corto de la plantilla permitirá que sigan asomando juveniles que a priori estarán en el equipo el próximo año. No obstante, hasta que se juegue el Real Valladolid – Rayo Vallecano no se sabrá si alguno viaja a Galicia en una lista a la que vuelve Corral tras sanción y en la que sigue ausente Deve debido a su lesión de larga duración.
Tanis, Dani, Arroyo, Corral, Royo, Mario, Calero, Rubén, Rai, Samanes, Dani Vega, Miguel Mari, Higinio, Iván Martín y Sinisterra son los quince que estarán seguro en Pasarón. El resto de la convocatoria se completará con algún juvenil, aunque también puede entrar Anuar.
Por su parte, el Pontevedra viene de romper recientemente una racha de seis encuentros sin ganar, que coincidió con la lesión de Mario Barco, su máximo goleador y mejor jugador. El navarro volvió en la segunda mitad del choque ante el Burgos, dio un gol y marcó otro y obró la remontada, mientras que el pasado fin de semana entró a falta de cuarenta minutos para el final y anotó el tanto del triunfo ante el Lealtad.
Aunque esta cuestión habla a las claras de la importancia del estellés en los planes de Luisito, el atacante del CD Lugo no es el único futbolista de gran calidad que viste de granate. Así, el carismático y controvertido técnico cuenta en su columna vertebral con el ‘parapenaltis’ Edu Sousa, con un defensa goleador como Javi Bonilla (lleva cinco tantos), un ‘todocampista’ como Kevin Presa, quien rechazó el pasado verano a equipos de superior categoría, con el imaginativo Abel Suárez o con el versátil David Añón.
Todos ellos querrán desquitarse de la derrota sufrida en la primera vuelta por dos a uno en Los Anexos, en un partido marcado por las posteriores declaraciones de su entrenador en rueda de prensa, donde desvió la atención y puso demasiados paños calientes a una mala actuación que desearán que no se repita ante su público, que ya vio ganar al filial blanquivioleta la temporada pasada.
En caso de imponerse a los de Rubén Albés dejarán a un rival por la promoción casi descartado, obligado ‘solo’ a cumplir con el que por otra parte era el objetivo, la salvación, y si acaso con una clasificación que, no obstante, apunta a ser buena y encuadrarse dentro de una magnífica campaña.
