La jugadora y una de las capitanas del San Pío reconoció que su equipo pagó la inexperiencia en la Segunda Femenina
Casi nunca es tarde para reaccionar, y más si hay un descenso en juego. La situación del San Pío X es complicada en el Grupo V de la Segunda Femenina, pero sigue aferrándose a la permanencia. Porque ese es el objetivo de un equipo que ha ido a más con el paso de las jornadas, aunque ya solo restan tres y se encuentra a dos puntos de la salvación.
Tras la victoria frente al Amigos del Duero, Lorena García, una de las capitanas, pasó por #HacemosCantera para analizar la situación en la que se encuentra su equipo. “Hemos echado cuentas porque nos quedan tres finales donde vamos a dar lo mejor de cada una para permanecer en la categoría, que es nuestro objetivo y sería una gran alegría para el club. Esperemos que la suerte esté de nuestro lado porque el Pozuelo está a dos puntos y si ganamos les superamos“, expuso.
Mantenerse en la categoría del plata del fútbol femenino en la temporada de su estreno sería algo positivo en la joven escuadra rojiblanca, que necesita evolucionar. “Nos estamos dando cuenta que es lo que necesitamos, ese plus, esa chispa que nos hace crecer futbolísticamente“, afirmó Lore.
Ahí es donde entra el factor experiencia, algo que no ha tenido desde el principio y que, poco a poco, ha ido adquiriendo. “La veteranía se nota y a nosotras nos falta. Estamos intentando cambiar el chip porque nos estamos dando cuenta de que podemos“, señaló.
Aunque fuera de casa la imagen dista mucho de la de Los Cerros. ¿Problemas por las comidas? “Influye porque no estamos acostumbradas a comer tan pronto y nuestro cuerpo no lo asimila bien; también la temperatura con la que llegamos… Al ser los viajes más largos no estamos tan concentradas como cuando jugamos en casa. Lo pagamos un poquillo”, respondió.
En cuanto al partido, dijo que “lo tuvo todo”: “Las ganas, el entusiasmo, la ilusión…”. “Fue un derbi regional muy peleado porque ambos nos jugamos mucho. Nosotras teníamos que intentar ganar sí o sí para seguir soñando con esta categoría. Fueron tres puntos deseados; el trabajo y la intensidad dieron sus frutos.”, explicó.
Antes de alcanzar la meta final, la de la victoria, el encuentro dejó varios detalles importantes: los penaltis y las paradas de Lucía. Precisamente, Lore fue la protagonista de la pena máxima a favor del Zamora. “Yo fui a disputar el balón y recibí golpe también, pero el árbitro lo malinterpretó. No fue penalti para mí“, comentó.
Mientras, de la segunda parte de esas claves alabó el trabajo de su cancerbera. “Qué decir de Lucía. Es una portera impresionante. Ha experimentado una evolución que sin duda es la mejor de todas”, dijo. Además, la propia Lore es otra de las que más han crecido. Le da igual jugar en el centro del campo que en el eje de la zaga: “Intento adaptarme a las posiciones en las que el míster me pone y trato de dar lo mejor de mí en cada posición“.
Todo ello podría seguir dando sus frutos si el próximo curso siguen en Segunda. Para ello deberán vencer al Pozuelo, aunque con el rabillo del ojo ya miran al derbi vallisoletano frente al Parquesol, que se disputará la semana que viene. “Será un partido con ganas e ilusión porque es un clásico vallisoletano y vamos a intentar luchar por otra final para conseguir tres puntos”, sentenció.
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