El madrileño, actual máximo goleador en Segunda División, asegura estar “más cómodo” jugando en la posición designada por Luis César y reconoce que la no llegada de Ortuño es “un beneficio”

Pasadas cuatro jornadas de competición, el Real Valladolid carbura. El abultado empate ante la Cultural y Deportiva Leonesa no solo permitió comprobar el buen estado de forma colectivo, sino confirmar una de las mejores noticias para los blanquivioletas: Mata continúa su idilio con el gol.
Tras sus dos goles en el derbi, el madrileño se sitúa como máximo goleador en Segunda División, a tan solo un tanto de igualar su registro anotador de la temporada pasada. No obstante, prefiere ser cauto.
“Estoy teniendo más fortuna porque las pocas ocasiones que estoy teniendo las estoy marcando. Es un privilegio estar ahí arriba peleando, aunque es anecdótico”, apuntó.
Buena parte de esa fortuna se debe a que, con Luis César, Mata desempeña un papel que conoce a la perfección.
“Estoy más cómodo jugando aquí y se está demostrando. Es una posición en la que he jugado siempre y en la que tengo más libertad para hacer lo que siempre he hecho. El año pasado era más complicado porque tenía unas funciones más concretas en banda”, explicó el ariete.
El madrileño es consciente de que “ahora todo es bonito y va bien, pero llegarán momentos en que no será tan fácil“, y aboga por seguir trabajando en pos del beneficio colectivo. “Tengo que aprovechar este momento e intentar que dure mucho. Cuando llegue lo otro seguiré aportando mi trabajo para que el equipo saque lo máximo, si no en goles, al menos en tarjetas, expulsiones o faltas”.
Mata, que fue protagonista en la tarde del domingo al provocar los dos penaltis, explicó la jugada que originó la segunda pena máxima. “Es más dudosa porque todo sucede muy rápido: el contacto es fuera, pero la caída es dentro. A veces te dan y otras te quitan: ante la Cultural me beneficia igual que el otro día ante el Tenerife me quitan un gol por un fuera de juego que no era”, afirmó.
El ariete también despejó la duda sobre por qué no repitió el lanzamiento desde los once metros. “Es una decisión técnica: el míster cree que un mismo jugador no tiene que tirar dos penaltis en un mismo partido. Es bueno para que anotemos todos y vayamos cogiendo confianza”, aseguró Mata.
Con respecto a las estadísticas, el madrileño prefiere esperar a que pasen más jornadas y poner en cuarentena el resultado obtenido en el derbi. “Este partido hace que los números se distorsionen un poco, todo se dispara a favor y en contra. Es un partido muy bonito de ver para el aficionado pero, en el tema táctico, seguro que los entrenadores no están tan contentos”, expuso.
La no llegada de Ortuño, “un beneficio”
A día de hoy, Jaime Mata se ha convertido en la principal referencia anotadora del Real Valladolid. El madrileño también se pronunció sobre la situación de su ‘colega’ Ortuño. “Era algo que nos venía muy bien. Podía aportar mucho y ayudar al equipo a seguir creciendo y estar arriba”.
Con todo, el delantero mostró un cierto alivio ante la previsible no llegada del murciano. “Me ha ayudado que no venga porque es competencia directa. Hasta que el club decida lo que hacer con esa posición estoy muy feliz porque si nos disputamos ese puesto entre dos, mejor que entre tres. Es un beneficio”, reconoció.
Ante la posibilidad de compartir el ataque blanquivioleta con Villalibre, Mata destacó que ambos pueden aportar “mucho”. “Tenemos los dos un perfil muy parecido: somos de mucha pelea y mucho trabajo, no damos un balón por perdido. Podemos dar mucha guerra a los defensas”, sentenció.
