El jugador vallisoletano de la UD Santa Marta habló en #HacemosCantera tras el derbi regional contra el Juvenil A blanquivioleta
Tuvo que ir el Real Valladolid al Alfonso San Casto para que la UD Santa Marta lograra su primera victoria este curso en la División de Honor. El Juvenil A blanquivioleta cayó en el derbi por 1-0, en un partido especial para los tres vallisoletanos que militan en el conjunto salmantino; aunque solo uno de ellos, Álvaro Mongil, pudo tener minutos.
Precisamente, el ex de la UD Sur fue titular y partícipe de ese triunfo importante para los suyos y que bajó a la Tierra al Pucela. “Teníamos muy aprendida la lección de cómo jugar al Real Valladolid. El partido salió como nosotros queríamos“, explicó Mongil en #HacemosCantera, en Radio Marca.
Para él fue “muy especial”. “Es el equipo de mi ciudad y del que he sido abonado toda la vida. Este tipo de partido se cogen con más cariño”, afirmó. Y es que aseguró que “como este” no tendrá “ninguno”.
A ello, le añadió que allí “también le tienen muchas ganas”. “La gente estuvo muy metida en el partido y se notaba mucho”, comentó, en referencia al enfrentamiento entre charros y pucelanos que siempre motiva a los primeros: “Según me han dicho, la rivalidad Valladolid-Salamanca es bastante grande“.
Mongil cogió las maletas este verano y puso rumbo a tierras charras para emprender dos aventuras: la futbolística y la universitaria. Sobre esta última, apuntó que ha comenzado la carrera de Periodismo; mientras que en lo que respecta al mundo del balón reconoció que le ha “costado un poco la adaptación“.
Aunque no se marchó solo, puesto que Dani Blanco, con quien ha coincidido en la UD Sur, y Sacris son los otros dos vallisoletanos que juegan en el Santa Marta. La situación de estos es diferente en la actual, ya que ambos se encuentran lesionados. Pese a ellos, cuando estén totalmente recuperados, el centrocampista tiene claro que “van a jugar seguro”.
Llegó procedente del conjunto de La Rubia y ya nota el cambio. “El trato es muy diferente. Paso de la Sur, un equipo de barrio, a trabajar en uno mucho más profesional. Al final, se agradece. Estoy muy a gusto y no me puedo quejar de nada”, sentenció. Pero no olvida de dónde viene y aseguró que irá al Felicísimo “siempre que pueda”.
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