Destaca la importancia de su portera en el triunfo ante el Alhóndiga, y reconoce que al Parquesol le faltó intensidad y comunicación, sobre todo en una primera mitad, en la que “el equipo no estuvo”
Hay una premisa que destaca a Óscar González sobre el resto de entrenadores. No es ni buena ni mala, simplemente es diferente. Siempre ha afirmado que prefiere vencer, marcando pocos goles pero sin encajar, en lugar que golear y que te marquen. En la victoria, sufrida cuando menos, de este domingo ante el Alhóndiga, quiso matizar su idea: “Esta bien ganar sin encajar, pero primero está ganar sin sufrir”.
Aunque afirma que es “bonito” obtener un triunfo así, más por el resultado que por el juego de su equipo, que en pocos momentos se asomó a esa sobriedad que nos tiene acostumbrados. “Venía un equipo aguerrido y no hemos estado a la altura. En la primera parte no estuvimos”, admitió, pero añadió que el resultado fue justo si se tiene en cuenta únicamente la segunda parte.
Al contrario que en la segunda mitad, en la que vio mejoría. “Fuimos corrigiendo con el paso de los minutos. Para hacer nuestro juego se necesita intensidad, comunicación. Si no se muestra eso, no se puede hacer nada”, explicó. Aun así, destaca la buena labor del Alhóndiga, que les tuvo contra las cuerdas en alguna ocasión. “Nos han molestado mucho. Es verdad que no nos han machacado a ocasiones, pero han sabido contrarrestarnos”, señaló.
Uno de los problemas a los que se ha tenido que enfrentar el técnico es el de las lesiones. Y es que sus dos chicas de arriba –Paulita y Ali– no pudieron jugar. En su lugar, utilizó a Rivas de mediapunta. “Es una jugadora habilidosa. Queremos una jugadora técnica en ese puesto, y lo intentó. No podemos culparla del partido, ni mucho menos”, arguyó.
A quien sí se puede culpar, en este caso de la victoria, es a Lucía Alba, que salvó al Parquesol con empate a cero en el marcador. “Nos salva de situaciones comprometidas. Sabemos de esa ventaja y tenemos que aprovecharlo”, remarcó. Pero González va más allá y elogia su categoría. “Lucía está un escalón por encima del resto de porteras de la liga. Para mí es la mejor con diferencia”, sentenció.