El centrocampista, que ya ha cumplido sus cuatro partido de sanción, recibió el premio al mejor jugador del Real Valladolid del mes de septiembre
Luismi ha sido premiado como mejor jugador del Real Valladolid del mes de septiembre. Los votantes, por medio de las redes sociales, le eligieron a él como el futbolista más en forma del mes pasado. “Es un premio al trabajo bien hecho”, explicaba este jueves el mediocentro que decía sentirse “muy contento” y agradecido tanto a la afición, como a quienes le votaron. Tampoco se quiso olvidar de sus compañeros, “me hacen crecer y mejorar día a día”, explicaba.
Lo cierto es que, pese a que Luismi tuvo un mes de septiembre bastante acertado, el mes de octubre se le está haciendo cuesta arriba debido a la sanción de cuatro partidos. “He pasado un tiempo bastante jodido porque se ha dado de mi una visión que no me corresponde, en ningún momento me dirijo al árbitro, lo que hago es lamentarme por como estaban saliendo las cosas, pero no insulto al árbitro. Al final ellos siempre llevan la razón”, señalaba el exsevillista que quiso ver este contratiempo desde el lado positivo, “aunque se me ha hecho eterno, en dos semanas ya he cumplido la sanción y estoy con muchas ganas de volver”, argumentó.
La buena actuación de Anuar y la vitola de indiscutible de Borja colocan a Luis César en una encrucijada: volver a depositar su confianza en el andaluz o seguir con el canterano. En cualquier caso, a Luismi eso no le quita el sueño. “Me limito a seguir trabajando, el que tiene que decidir es el míster”, puntualizaba antes de alabar a su técnico: “La confianza del míster es clave. Tengo mucho que agradecerle. Desde el primer momento confió en mí y he intentado devolverle esa confianza. En un equipo tan compensado y con tanta competencia está claro que si no aprovechas tus oportunidades va a entrar otro que lo va a hacer igual o mejor”.
Teniendo en cuenta la competitividad, alta, y el nivel ofrecido por su sustituto, fue cuestionado por cómo había visto en su ausencia a Anuar. Y dijo que se alegra por lo bien que lo está haciendo y le considera un “chaval que rinde bien” y que ha hecho “un gran trabajo”. Así lo ha visto desde fuera, desde donde se ven las cosas diferentes, aunque no por ello deja de calificar la marcha del equipo como “muy buena”; eso sí con capacidad de mejora. “Estamos creciendo poco a poco, tenemos fallos y estamos trabajando sobre ellos”, subrayó.
Su irrupción este año como uno de los mejores jugadores de la plantilla tiene dos explicaciones; una, la ya mencionada confianza de Luis César, y la otra, la cesión en la segunda mitad de la campaña pasada al Nástic de Tarragona. “Salir al Nàstic fue todo un acierto. Este año con la confianza del míster y del club estoy mucho mejor, y en el campo me están saliendo mejor las cosas”, señaló el ‘6’ blanquivioleta, que ve al Pucela con la idea y la capacidad de ganar en Reus.