El delantero del Real Valladolid, que volvió a marcar, habló sobre su futuro, pero sobre todo, sobre el presente y lo “contento y feliz” que está en el club
Foto: LFP
El hombre de moda, sin ninguna duda, en el Real Valladolid es Jaime Mata. No podía ser de otra forma cuando ha marcado veintiún goles en veinticinco partidos, los dos últimos los consiguió ante el Cultural Leonesa este sábado después de haber estado un encuentro por sanción.
Como se comprobó, el ‘parón’ no le ha afectado para nada, aunque en cierto modo sostiene cierta presión por seguir manteniendo esas cifras. “El número de goles hace que la exigencia sea mucho mayor y parece que si no metes en el siguiente partido estás acabado”, dijo el pichichi blanquivioleta.
Su primer tanto, el segundo de la tarde, fue de cabeza gracias a un centro de Hervías, al que quiso atribuir “parte del gol” ya que solo tuvo que “poner la cabeza” para rematar. El gol de penalti vino después de una jugada de Ontiveros, que puso la pelota al propio Mata y el central se le echó encima. Sobre la pena máxima, el delantero madrileño comentó que nadie le “preguntó” sobre quién lo tiraba. “Lo del penalti es una responsabilidad que me gusta asumir, ayer no vino nadie a preguntar, eso refuerza la confianza en mí”, subrayó.
De su nuevo compañero, Javi Ontiveros, dijo que puede “dar muchísimo” a este equipo por ser un jugador “diferente”. A la vez, no considera que el resto de compañeros jueguen para él, sino que ante la Cultural salió así como un “hecho del juego más”. En relación con los goles que marque él o los demás, Jaime Mata sostiene la importancia de “mantener la efectividad” puesto que al “cerrarse más atrás” hay que aprovechar cada oportunidad que se tenga.
A nivel personal, Jaime Mata no puede estar más contento por cómo le están saliendo las cosas. El mercado de fichajes mantenía en alerta a todos los aficionados por si podía venir cualquier oferta que hiciera que el pichichi blanquivioleta se marchara. El propio jugador ha confirmado que se ha quedado para darlo todo con la camiseta del Real Valladolid. “Ha habido cosas y opciones, pero no era ni el momento ni la manera. Estoy muy contento y feliz y ahora mi familia y yo estamos disfrutando porque están saliendo las cosas bien”, apuntó.
El punta reiteró que no quería “forzar” una situación que no era “beneficiosa” para ninguna de las dos partes y que él “respeta” el contrato que se firmó hasta junio de 2018. Una vez que llegue esa fecha, será el momento de hablar y poner las cartas encima de la mesa. “Cuando llegue junio veremos lo que pasa, hay que dejar fluir las cosas. No tengo nada visto, estoy súper centrado aquí y eso es lo que está haciendo que salgan las cosas bien. Estoy haciendo goles que hace que si llegan ofertas sean mejores”, remarcó.