El Real Valladolid recibe al Albacete este sábado a las 16:00 horas, con la única idea de vencer y esperar para alcanzar el sexto puesto de la clasificación
A dos puntos. A tan solo dos puntos del sexto puesto está el Real Valladolid después de todos los vaivenes que ha dado esta temporada que, sin darnos cuenta, está cerca de acabar. Superó el importante encuentro frente al Numancia, contra el que solo valía ganar para seguir en la pelea. Lo hizo con un solitario gol de Borja, pero que bien sirvió para volverse con los tres puntos.
Con la inyección de moral que supuso ganar en Soria, el Real Valladolid recibe al Albacete Balompié este sábado, a partir de las 16:00 horas, con la intención de encadenar dos victorias consecutivas y esperar a que los rivales pinchen para poder alcanzar esa ansiada sexta plaza. Además, sería la primera de Sergio en casa, más especial si cabe después de su recién estrenada paternidad.
Por tanto, y por enésima semana, el enfrentamiento contra los manchegos es un match-ball por entrar en una zona que el Pucela dejó hace mucho tiempo y donde quiere volver a instalarse definitivamente. Perder sería un sopapo a las aspiraciones y un empujón para los otros equipos que pelean por el mismo puesto, con dos enfrentamientos directos en las dos últimas jornadas.
Una semana más, y como viene siendo habitual desde que Sergio González está en el banquillo blanquivioleta, hay varias bajas, tanto por sanción como por lesión. En el primer apartado, Fernando Calero y Óscar Plano deberán ver el partido desde la grada por acumulación de amarillas (además están apercibidos: Antoñito, Nacho, Luismi, Toni y Míchel); en la enfermería continúan Cotán, Luismi y Al-Mousa, además de Deivid, quien ya toca balón y trabaja con sus compañeros después de estar en el dique seco desde febrero.
Las sanciones de Calero y Plano obligarán al cuerpo técnico a modificar el once que venció en tierras numantinas, y se barajan varias opciones para sustituirles, aunque no será hasta una hora antes del encuentro cuando se conozca definitivamente el nombre de los que actúen en el once. Para el defensa, Moyano tiene todas las papeletas, aunque Borja también podría ser el compañero de Kiko Olivas en el centro de la zaga. Toni Martínez, Chris Ramos o incluso Toni Villa pueden acompañar a Jaime Mata en la punta de ataque en lugar de Plano.
Sergio González ha conformado la lista de convocados con los dieciocho jugadores disponibles, que son: Masip, Becerra, Antoñito, Moyano, Kiko Olivas, Rotpuller, Nacho, Borja Herrera, Borja, Anuar, Míchel, Hervías, Ontiveros, Gianniotas, Toni, Toni Martínez, Chris Ramos y Jaime Mata.
El Albacete, a certificar la permanencia matemática
El Real Valladolid no tendrá nada fácil vencer al Albacete, equipo que llega a Zorrilla virtualmente salvado y quiere certificarlo matemáticamente cuanto antes. Bien es cierto que el conjunto manchego acumula siete partidos sin conocer la victoria, si bien el punto logrado la jornada pasada contra el Cádiz le da alas para intentar la machada en tierras castellanas.
Enrique Martín acostumbra a jugar con defensa de cinco, lo que ha hecho que su equipo ‘solamente’ haya encajado 38 goles, once menos que los recibidos por el Pucela. Bien es cierto que a la hora de materializar le cuesta más, ya que ha marcado 31, con Zozulya como referencia en ataque, por los 57 que han conseguido los blanquivioletas. Fuera de casa, el ‘Alba’ tiene un balance de tres victorias, ocho empates y siete derrotas.
El cuerpo técnico ha diseñado una convocatoria de viente jugadores, por lo que habrá dos descartes antes del partido. Los jugadores que vienen a Valladolid son Tomeu Nadal, Rubén Miño, Álvaro Arroyo, Cifuentes, Gaffoor, Chus Herrero, Carlos Delgado, Morilla, Bíttolo, Rafa Gálvez, Dani Rodríguez, Susaeta, Jon Erice,César de la Hoz, Álvaro Gómez, Zozulya, Aridane, Acuña, Héctor y Bela. Fuera de la lista se quedan Pelayo, Saveljich y Gorosito.
Pizarro Gómez será el encargado de impartir justicia en la contienda entre castellanos y manchegos. Además de todos los ingredientes deportivos, los prolegómenos del partido serán más especiales que nunca. La afición blanquivioleta se volcará con el equipo, pero sobre todo con Julia, la niña de diez meses que sufre atrofia muscular espinal.