El técnico del Promesas valoró la importancia de “tres puntos vitales para estar en una zona tranquila” y destacó los números del filial con respecto al año pasado
El Promesas cerró el año de la mejor manera posible, con una victoria ante el CD Guijuelo. Su técnico, Miguel Rivera, compareció ante los medios de comunicación feliz por sumar una nueva vitoria en un choque “demasiado importante”, que el filial afrontó con numerosas bajas.
“Ha sido un partido vibrante que solo se ha desequilibrado al final, ningún día tenemos ese punto de tranquilidad. Son tres puntos vitales para estar en una zona tranquila y para que los chicos cojan confianza. Ahora viene un período en el que podemos descansar, merecidamente, y recuperar a gente importante”, valoró.
El técnico, “muy orgulloso y muy contento” del trabajo de sus pupilos, destacó la labor del filial en “una categoría en la que no hay un partido fácil”. “Somos uno de los equipos más humildes y, cuando tenemos todos los recursos, contamos con más opciones. Tiene mucho mérito lo que los chicos están consiguiendo a base de trabajo y de convencimiento”.
Pese a las ausencias, los blanquivioletas firmaron un partido muy serio, especialmente en defensa, recordando a la versión mostrada en el arranque del curso liguero. “Hicimos un inicio de competición buenísimo, estando en los puestos altos, y queríamos centrarnos en ese trabajo. Teníamos muchos problemas pero nos hemos empeñado en hacer un esfuerzo para conseguir estos tres puntos“, subrayó.
De este modo, el Promesas cierra el año sumando una victoria que le permite mejorar sus registros con respecto a la temporada pasada. “Tenemos nueve puntos más que el año pasado y aún queda un partido de la primera vuelta. Lo verdaderamente importantes son los veintitrés puntos que ya tenemos, que es la cota mínima para superar nuestro objetivo de cuarenta y cinco”, sentenció Rivera.