El atacante hispano-brasileño militará este curso cedido por el Real Valladolid en el UM Escobedo, próximo a su localidad de origen. El ‘overbooking’ de fichas en el Promesas mantiene las opciones de que salgan varios jugadores más
El Real Valladolid ha cerrado la novena cesión de jugadores que militaron la pasada temporada en su equipo juvenil de División de Honor con el préstamo confirmado de Dali al UM Escobedo. De esta forma, el atacante hispano-brasileño jugará durante este curso en el que fuera campeón del grupo cántabro de Tercera la pasada campaña, que está entrenado por el exfutbolista profesional Pablo Casar.
Originario de Cabezón de la Sal –de donde llegó al Real Valladolid siendo cadete procedente del Textil Escudo–, Dalisson retornará circunstancialmente a su casa, puesto que Escobedo de Camargo se encuentra a menos de cuarenta kilómetros de su localidad, hecho que ha sido decisivo para que la elección del destino, frente al interés del Atlético Tordesillas y del Palencia Cristo.
La del hábil mediapunta, pilar fundamental del Divi la temporada pasada a las órdenes de Javier Baraja, no es la última baja que se espera, puesto que el hecho de que Stiven Plaza y Jorge de Frutos hayan sido inscritos en La Liga con ficha B –no así Javi Sánchez, presumiblemente– desencadenará que haya varias más, entre ellas la de Alberto Gil, de quien varios compañeros ya se han despedido a través de redes sociales.
Contando con la marcha del valenciano y con la cesión de El Hacen, en la cual se lleva semanas trabajando, seguirían sobrando dos fichas. Por Marcos André siguen interesándose clubes de Segunda B, aunque la idea sigue siendo que en caso de salir lo haga a Segunda, mientras que la marcha de Miguel no está descartada, después del interés suscitado en el Racing, desvelado por El Desmarque.
En la escala de prioridades, no obstante, el Real Valladolid sigue contando con él a pesar de su deseo de cambiar de aires, por lo que un tercer afectado podría salir de los otros dos atacantes que acaban de pasar de juveniles, Óscar y Víctor. El delantero vallisoletano parece contar con el beneplácito de cuerpo técnico y dirección deportiva para quedarse, adelantando al canario en el escalafón. Este, no obstante, tendría mercado en el Grupo VIII de Tercera División, además de haber despertado incluso el interés de algún Segunda B de nivel alto.