El técnico del Parquesol cree que el gol ante el Alavés puede traer un cambio de dinámica y que será necesaria la paciencia y la confianza
En el minuto 91, el gol de Sara Buitrago trajo consigo a Rubén Jiménez una sensación de liberación, que hizo justicia al partido de su equipo y que recordó a tiempos pasados cuando la épica del Parquesol brillaba por su presencia cada fin de semana. “Cuando vi el balón entrar pensé que podía empezar así un cambio de tendencia”, dijo su técnico.
Eso es algo necesario, porque pese a que este punto sabe a victoria el triunfo aún no ha llegado. Solo es cuestión de paciencia. “Trabajamos para mantener la calma. Necesitamos adaptarnos, trabajar para superar el momento en el que estamos. Y todo pasa por la confianza”, asumió Rubén Jiménez en su paso por los micrófonos de #HacemosCantera en Radio Marca.
Y él la confianza la tiene en su equipo, pero sabe que es muy importante este año gestionar las emociones, puesto que su vestuario se ha ampliado y hay futbolistas acostumbradas a jugarlo todo que ahora no presentan tanto protagonismo.
“Es una situación nueva para muchas, pero el entrenador intenta ser justo y, sobre todo, ganar el partido. Queremos sacar el máximo rendimiento a todas“, explicó el míster que, aun así, reconoció que pese a que la plantilla es “muy completa”, no rechazaría la llegada de jugadoras en invierno.
Más allá de los resultados, Rubén se muestra satisfecho de la imagen que su equipo transmite ante todos los rivales. “La sensación es la de que competimos contra equipos de entidad. Eso es buen síntoma, porque muy pocas veces el contrincante nos ha superado”, subrayó, si bien admitió que “cada detalle en contra es un gol”. “Por eso una de las claves para remontar la situación que esos detalles cambien de lado. “En una categoría tan igualada marcar gol o no es lo que da la diferencia“, añadió.
“Es más una situación de mala suerte, pero tenemos que marcar las ocasiones que tenemos”, sugirió. Sin ir más lejos, ante el Alavés el Parquesol dispuso de hasta seis ocasiones claras de las cuales solo materializó la más rocambolesca, a balón parado: “Nos cuesta marcar, materializar espacios y trabajamos esas situaciones para cambiarlo”.
El gran objetivo es el de la permanencia y, a partir de ahí, crecer. Ese es el reto personal de Rubén Jiménez, crecer a la par que el club. Lo más cercano es terminar la primera vuelta, a poder ser “con cinco o seis puntos” en estos cuatro duelos, tres de ellos ante rivales muy complejos. El primero este fin de semana ante el Oviedo, en Asturias, donde las naranjas cosecharon la única victoria hasta el momento.
Escucha la entrevista completa haciendo clic debajo (a partir del 6:21):