La sensación de que muchas de las cosas que parecían no funcionar en el equipo se han disipado surgen de la mano del técnico teutón, que ha logrado, en tiempo récord, la revitalización del Barça además de la recuperación de uno de los buques insignia del Barcelona, la de su goleador Robert Lewandowski. El Barça llega a este momento de la temporada con muchas certezas de que la llegada de Hansi Flick ha convertido las dudas en argumentos.
El Barcelona necesitaba el resurgir del delantero polaco, tras dos temporadas en las que los altibajos habían marcado un pobre estado de forma del goleador, demasiado irregular, sobre todo, tras la celebración del atípico Mundial de Catar 2022. Su participación con Polonia, también marcada por la ineficacia, fue un punto de partida negativo para el ariete, que vio cómo bajaban las prestaciones también en su club.
Si bien esa segunda parte de la temporada 22/23 fue mala, aunque maquillada con la Supercopa de España y LaLiga, Lewandowski sí tuvo unos números globales considerables. En 46 partidos jugados bajo el mando de Xavi Hernández en el Barça esa temporada, Robert Lewandowski logró anotar 33 dianas, suficientes para ser pichichi y quedar sexto en la disputa de la valorada bota de oro europea.
Y, sin embargo, el delantero polaco se vio en numerosas ocasiones más incómodo de lo debido en el marco táctico que le otorgaba Xavi en su once. Si bien es cierto que el dibujo y la intención parecía darle el espacio necesario a Lewandowski, había algo que no acababa de encajar con el veterano ariete. La siguiente campaña, la 23/24, entre rumores de venta y problemas en el vestuario, Lewandowski logró anotar “solo” 26 goles en toda la temporada para el conjunto culé.
El talento de Lewandowski, el contexto de Flick
Aunque sin reconocer una problemática abierta en el vestuario culé, Lewandowski ha mejorado claramente esta temporada. La llegada de Flick le ha dado otro escenario al contexto competitivo para alimentar al Barça de goles más que necesarios para su aspiración de ganar todo esta temporada. De momento, con Copa del Rey y Supercopa de España ganadas, parece que el siguiente reto es afianzar LaLiga y conseguir una plaza en la final de la Champions League.
Un paso más que, de conseguirse, deberá agradecerse en gran medida a los goles logrados por ‘Lewy’ y, sin duda, al marco que le ha creado Hansi Flick en Barcelona. Como delantero centro, ha sido capaz de conciliar el amplio currículum goleador que se le exige a un delantero de su nivel con las exigencias físicas y de sacrificio que pide Flick a sus once jugadores sobre el campo.
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— FC Barcelona (@FCBarcelona) March 30, 2025
Una lectura francamente sorprendente vista la temporada y media anterior del delantero polaco, donde no solo la puntería sino el físico, parecía faltarle el aire en muchas de sus carreras. Esa capacidad para responder a todos los compromisos de mínimos que exige Flick hace que al poner en una balanza todo lo que está dando Lewandowski, el delantero logre salir ganando en la ecuación.
No ha respondido mal el equipo sin Lewandowski sobre el campo. La presencia de Ferran Torres, teórico delantero centro titular ante el Real Valladolid en el José Zorrilla, ha sido satisfactoria desde los números y desde las sensaciones. La gran prueba, precisamente, fue la final de la Copa del Rey jugada en Sevilla, en la que el suplente del polaco no solo logró mantener el nivel, sino que tuvo la oportunidad de marcar el gol del empate que le dio alas al Barça para ir a la prórroga. Esa ausencia de Lewandowski no significó que su papel fuera irrelevante. En Copa del Rey, el delantero había logrado marcar tres goles en tres partidos, siendo titular solo en uno de ellos.
El polaco, desde luego, está respondiendo con creces. En los 48 partidos jugados en la actual temporada, el delantero centro del Barcelona lleva 40 goles y 3 asistencias, siendo en este caso el tercer clasificado para la bota de oro europea de esta campaña, solo por detrás de dos bestias goleadoras en racha, como Viktor Gyokeres y Mohammed Salah, este último ya campeón de la Premier League con el Liverpool de Arne Slot.