¿Harto de que tu tortilla francesa se quede pegada a la sartén aunque uses aceite de sobra? Pues estás de suerte, porque la solución no está en cambiar de sartén ni en comprar la más cara del mercado, ya que el verdadero truco para que la tortilla francesa no se te pegue tiene más que ver con la temperatura que con el material. Y sí, es uno de esos consejos que pasaba de boca en boca entre abuelas antes de que existieran las sartenes antiadherentes o los sprays desmoldantes.
Lo único que debemos hacer es entender cómo reacciona el calor en el metal y ver cuáles son las señales que nos está dando nuestra sartén y, cuando todo esto nos quede claro, solo necesitaremos una pequeña cantidad de aceite para poder preparar una tortilla francesa tan perfecta que hará que hasta tu abuela te colme de elogios. Basta ya de terminar haciéndote unos huevos revueltos porque se haya pegado a la sartén o se haya roto cuando ibas a darle la vuelta, porque en este artículo te vamos a contar el secreto para que esto no te vuelva a pasar nunca.
¿Por qué se pega la tortilla francesa?
Hay algo que muchas veces pasamos por alto, y es que la sartén necesita alcanzar una temperatura concreta antes de añadir no solo el aceite, sino también los huevos. El problema más habitual al hacer una tortilla francesa es que vertemos los huevos cuando la sartén aún está fría o no lo suficientemente caliente. ¿Y qué pasa entonces? Que el huevo entra en contacto con una superficie que no ha terminado de dilatarse, se mete en los micro poros del metal y se queda, literalmente, atrapado.
Nuestras abuelas sabían esto sin necesidad de estudios científicos y, por eso siempre decían aquello de “deja que la sartén se caliente primero, hijo/a”, algo que no soltaban porque sí, ya que si lo hacían porque sabían que, si echaban el huevo antes de tiempo, la tortilla francesa no saldría bien.
El punto ideal para que la tortilla francesa no se pegue se llama efecto Leidenfrost, y es cierto que suena muy técnico, pero es muy fácil de comprobar en casa ya que solo hay que echar unas gotas de agua en la sartén caliente. Si las gotas se quedan como “bailando” sin evaporarse al momento, ya tienes la temperatura ideal, siendo este el momento perfecto para añadir el aceite, dejarlo calentar un par de segundos y luego verter los huevos batidos.
Cómo hacer una tortilla francesa perfecta, paso a paso
Como hemos podido ver, preparar una tortilla francesa sin que se pegue no depende de tener una sartén que sea del último modelo que ha aparecido en el mercado, ya que cualquiera de ellas sirve si sigues los pasos correctos. Lo primero que tienes que hacer es ponerla a calentar a fuego medio durante tres o cuatro minutos mientras bates los huevos, sin prisa, dejando que la sartén coja temperatura de forma gradual.
Cuando creas que ya está lo suficientemente caliente, haz la prueba del agua para comprobar que has alcanzado el punto Leidenfrost y, en ese momento, engrasa ligeramente la sartén con una brocha o con papel de cocina, espera dos segundos más y añade el huevo batido.
Una vez hecho esto, debes dejar que la tortilla empiece a cuajarse por los bordes sin moverla y, cuando esto haya pasado y con un movimiento muy suave, inclina la sartén para que se despegue poco. Sabrás que has hecho bien todos los pasos cuando tu tortilla francesa se deslice sola y tenga un color doradito y uniforme.
 
			