Si estabas pensando en hacer una escapada rural este verano y los destinos más turísticos no te convencen, puede que tengamos la alternativa perfecta para ti. Y es que aunque los campos de lavanda de Tiedra (Valladolid) se hayan hecho famosos en redes sociales, hay otros pueblos que no solo rivalizan con su belleza, sino que ofrecen una experiencia más tranquila, auténtica y llena de actividades para todos los sentidos; además de que no tendrás que cruzarte con multitudes para disfrutar del característico aroma y del paisaje malva que tiñe estas zonas entre finales de junio y principios de agosto.
Hablamos nada más y nada menos que de Caleruega y Cilleruelo de Arriba, dos desconocidos pueblos de la provincia de Burgos en los que podrás disfrutar de los campos de lavanda cuando florecen. Además, en estos lugares nos solo podrás pasear y tomarte fotos rodeado del color morado de estas flores, sino que también cuentan con festivales, talleres artesanos, catas y hasta yoga entre lavanda.
Caleruega y su Lavanda Fest
Caleruega ha sabido combinar su impresionante patrimonio histórico con la estacionalidad de sus campos de lavanda, creando un evento que cada verano atrae a miles de visitantes, el cual se llama Lavanda Fest. Durante el segundo fin de semana de julio, las calles del pueblo se llenan de puestos de artesanía, espectáculos de danza, música tradicional y zonas de descanso donde saborear algo en los populares ‘foodtrucks’, todo ello con rodeado de lavandas y de su increíble aroma.
Este pueblo, reconocido como uno de los más bonitos de España y parte de la Red Nacional de Pueblos Acogedores, ofrece mucho más que paisajes que parecen sacados de una postal, ya que aquí nació Santo Domingo de Guzmán, siendo el Real Monasterio que lleva su nombre una parada obligatoria, con su claustro románico y su fachada barroca. También puedes subir al Torreón de los Guzmanes para contemplar, desde lo alto, el contraste entre los viñedos y los campos de lavanda que rodean Caleruega.
Cilleruelo de Arriba y Aire de Arlanza
Si buscas algo más tranquilo, puedes ir a Cilleruelo de Arriba, un pequeño pueblo de la comarca del Arlanza que cuenta con el proyecto Aire de Arlanza, el cual ha revolucionado el concepto de agroturismo convirtiendo la lavanda en motor de vida y atracción turística. Aquí puedes recorrer los campos de lavanda, visitar su destilería artesanal (Aromáticas Cynol) y conocer el proceso completo de cultivo, destilación y aprovechamiento de esta planta.
Además, cada año celebran la Fiesta Cosecha de la Lavanda, que en la edición de este año ha tenido lugar el pasado 2 de agosto. Se trata de una jornada para todos los públicos, con actividades que van desde talleres florales y yoga entre lavanda hasta catas de cerveza artesanal y vino local. Todo acompañado de música en directo, mercadillo y propuestas gastronómicas que harán que incluso los más urbanitas disfruten de la vida en el campo. Como toque final más histórico, tenemos la iglesia barroca del siglo XVIII presidiendo el entorno, completamente rodeada por campos de lavanda.
Los campos de lavanda son una alternativa al turismo masivo
Y es que lo que hace especial a estos pueblos no son solo sus campos de lavanda, un claro aliciente para visitarlos cualquier fin de semana de verano, sino que han sabido mantener su esencia a la vez que ofrecen propuestas para un turismo mucho más consciente y menos masificado del que estamos acostumbrados. Estos campos de lavanda imprimen un fondo muy bonito para tu visita y tus fotos, pero no hay que olvidar que también podemos descubrir mucho sobre la historia y la gastronomía local de estos lugares, invitándonos a parar un momento y respirar el increíble de estas flores.
 
			