Análisis del próximo rival del Real Valladolid.
Seis partidos. Seis finales. Cuatro de ellos en casa, dos fuera. Dieciocho puntos. A veces las matemáticas parecen sencillas, pero nunca a un seguidor del Valladolid se le han hecho tan difíciles las cuentas para una operación tan sencilla como ir sumando de tres en tres. Tras la disputa del encuentro aplazado entre Cartagena y Celta por fin el equipo blanquivioleta puede presumir de depender de sí mismo, pero el objetivo final aún está lejos.
Toca ser mejor que los celestes en una carrera de fondo. Una competición por ver quién aguanta mejor el tipo en seis asaltos en la que ya lleva ventaja el Valladolid.
¿El primer obstáculo para los blanquivioletas? Un Hércules que no llega en una racha mucho peor que la del Pucela tras cinco partidos sin conocer la derrota.
Nada está perdido
Precisamente el último de los encuentros del Hércules, un empate a cero en el Rico Pérez, es el que rompe una buena cadena de resultados que se venía dando desde el pasado uno de abril, última vez que los de Mandiá hincaron la rodilla en Liga. El contendiente que obró la gesta fue el Córdoba con un resultado de tres goles a uno.
Desde entonces, el equipo alicantino lleva invicto cinco choques con tan solo la mancha en el expediente del último empate. Por si fuera poco, no han sido rivales menores a los les ha pintado la cara. Girona (4-2), Murcia (2-6), Celta (1-0), Elche (0-3) y el ya mencionado Almería (0-0) no han conseguido en ningún caso llevarse los tres puntos al zurrón al enfrentarse al Hércules, aupando estos resultados a los blanquiazules hasta la cuarta plaza con 64 puntos, a siete del Pucela.
Los de Mandía buscarán este domingo prolongar otro partido más su espectacular acelerón, aunque saben que no será fácil ante el mismo equipo al que aspiran a arrebatarle la plaza de ascenso directo. De ganar los de Djukic el domingo, se desharían definitivamente del Hércules situándose a diez puntos, mientras que si hicieran lo propio los alicantinos seguirían soñando con alcanzar la segunda plaza de privilegio en los cinco encuentros restantes.
Dadas las circunstancias, el primer beneficiado de un empate no sería otro que el Celta, que verá el partido desde casa sabiendo ya su resultado en el partido que le enfrentará al Alcorcón.
Uno de los detalles que ha llevado al Hércules a alcanzar una situación más que digna en esta recta final de temporada es su regularidad tanto en el Rico Pérez como lejos de él. Si tras el empate en Coruña el Valladolid ha quedado empatado con el Celta a treinta y un puntos como mejor visitante, el Hércules se encuentra en tercera posición con veintinueve.
Los herculinos son además el conjunto que menos goles encaja lejos de casa de toda segunda, quince en diecisiete partidos, mientras que en cuanto a goles a favor se encuentra en cuarta posición, empatado con el Elche, con veinticuatro.
Djukic desconfía
Djukic se mostró cauto el pasado jueves en rueda de prensa en referencia hacia el partido del domingo. Para el entrenador serbio el Hércules es un equipo “que juega con intensidad, cierra muy bien los espacios y juega muy bien a la contra por contar con gente muy rápida arriba, sobre todo por las bandas”, en boca del propio míster.
Esto hace más complicado el partido a priori, dado que si realmente el equipo blanquiazul consigue llevar a cabo su juego tal y como lo describe el entrenador serbio, puede cortocircuitar el planteamiento del equipo blanquivioleta, muy basado en esas premisas.
En cuanto a los jugadores de los que habla Djukic, aquellos tan veloces y capaces de crear contras letales, no se refiere a otros que a Carlos Calvo, Arbilla o Gilván, auténticos cohetes para patearse en campo en apenas unos toques para plantarse en el área rival. Tampoco deberá perder de vista la defensa pucelana a jugadores como Míchel, pichichi del equipo con diez goles.
Poca ausencia
Juan Carlos Mandiá no tendrá mucho problema para confeccionar el once que tan buenos resultados le está dando últimamente. Solo Sardinero será baja por un fuerte golpe en el muslo derecho, de manera que el antes mencionado Carlos Calvo será su sustituto en la banda derecha. Gilván y Carlos Calvo forman un tótem muy interesante intercambiando sus posiciones en ambas bandas, otro peligro más para la portería de Jaime.
En el apartado de sanciones el Hércules no solo no cuenta con ninguna baja, sino que además Mandiá recuperará para la causa en el centro del campo a Abel Aguilar, ausente ante el Almería por acumulación de amarillas.
Curiosidad del rival de esta jornada: El equipo blanquiazul acumula un 31’3% de goles marcados en la primera mitad, mientras que el 68’7% restante los marca en la segunda. Los de Djukic deberán estar más serios si cabe en defensa tras el descanso.
