Real Valladolid y Córdoba empataron sin goles en la tercera jornada de LaLiga Hypermotion. Fue un encuentro con buenos detalles para ambos conjuntos, que tuvieron sus opciones, pero en clave blanquivioleta los de Almada pusieron todo de su parte para tratar de vencer a los blanquiverdes. Carlos Marín fue la principal clave para entender por qué no se movió el marcador, aunque Guilherme Fernandes también tuvo bastante culpa. Con este empate, los locales suman siete puntos de nueve posibles, a la estela de Racing de Santander y Sporting de Gijón, que han hecho pleno de Vitorias en las tres primeras fechas.
Antes del encuentro, un ‘espectador’ pilló por sorpresa al resto de asistentes. El Real Valladolid oficializó el fichaje de Lachuer en el intervalo entre el final del calentamiento y el inicio del partido, enfocando al centrocampista en la pantalla del videomarcador de Zorrilla. Con esas buenas nuevas, el balón comenzó a rodar en el césped del coliseo blanquivioleta por segunda vez esta temporada.
La primera oportunidad fue para el Córdoba y estuvo en los pies de un exblanquivioleta, Sergi Guardiola. El delantero recogió un balón dentro del área y disparó, pero su intento se marchó por encima del travesaño. Respondió inmediatamente Stipe Biuk. El croata llegó a línea de fondo, pero, al verse sin opciones de centro, decidió fabricarse el hueco para buscar el tiro, y lo consiguió, pero la ejecución final no fue buena y el balón se fue muy desviado.
Latasa tuvo varias ocasiones en situaciones de centro. La primera llegó en un saque de esquina, el punta remató bien de cabeza, pero Carlos Marín despejó la pelota. El balón le llegó a Pablo Tomeo, que probó suerte pero a la segunda logró atajar el guardameta del Córdoba.
El Real Valladolid se notó cómodo en la primera parte y efectuó una buena presión alta. Se sabía que el Córdoba era un equipo valiente, y que el espacio que dejaba atrás podía aprovecharlo el Pucela. Sobre todo en la primera parte logró hacerlo y Amath pudo adelantar en dos ocasiones al equipo blanquivioleta. La primera llegó tras una buena peinada de Latasa, el extremo galopó por el costado derecho, hizo una bicicleta y sacó un zurdazo que, sin embargo, no puso en demasiados aprietos al portero rival. La segunda fue poco antes del descanso. Tras un pase alto en diagonal, Amath hizo un gran control orientado y trató de batir a Carlos Marín con un buen disparo cruzado, pero, una vez más, el cancerbero blanquiverde negó el gol al Real Valladolid con una espléndida intervención.
Las hemos tenido, afición. ¡Vamos a por más en la segunda parte!#LaLigaHighlights #LaLiga pic.twitter.com/rhUKgY8ah4
— Real Valladolid C.F. (@realvalladolid) August 30, 2025
El Córdoba apretó en la segunda parte ante el Real Valladolid
En la segunda mitad los primeros acercamientos fueron para los de Guillermo Almada. Latasa remató un muy buen centro de Alejo con la zurda, pero su testarazo se marchó un poco alto. A pesar de este arreón inicial del Real Valladolid, el Córdoba supo reponerse, se activó y gozó de los mejores minutos del encuentro en el tramo intermedio del segundo acto. Tuvo que intervenir Guilherme Fernandes con una mano providencial ante una volea de Jacobo desde fuera del área en un saque de banda botado larga por Ignasi Vilarrasa. El luso se hizo fuerte, desvió la pelota, que se chocó en la cruceta, y atrapó el rechace.
Carracedo inició una muy buena jugada combativa que culminó en un golazo de Jacobo desde fuera del área. No obstante, intervino el VAR para avisar de una mano previa en la acción, por lo que fue anulado. Tras el susto, Almada dio entrada a Alani y a Trilli e hizo debutar con la blanquivioleta a Julien Ponceau, Meseguer, Alejo y Amath fueron los sustituidos y Chuki se movió a la banda.
Volvió a dar un paso al frente el Pucela. A balón parado tuvo una nueva oportunidad de abrir el marcador. Chuki, en una falta bastante lejana, puso un centro medido al segundo palo que buscaba la cabeza de Pablo Tomeo, el central trató de sorprender a Carlos Marín por el palo corto, pero el portero parecía imbatible en esta tarde de sábado.
Garri y Xavi Moreno ingresaron también al terreno de juego en el tramo final y en las botas del primero pudieron haber estado los tres puntos. El lateral izquierdo arrancó una internada en el área rival y disparó al palo corto, donde intervino el de siempre, Carlos Marín. Ponceau recogió la pelota y se la pasó a Trilli, que marcó a placer, pero el colegiado señaló correctamente fuera de juego del mediapunta, por lo que no subió al marcador.
Los minutos finales estuvieron muy disputados, y pese a tratarse de un ‘resultado gafas’ fue un choque entretenido entre dos conjuntos que no renunciaron a la idea de ir a por la victoria en ningún momento, cada uno con sus armas y con un Real Valladolid que, especialmente, hizo más daño por las bandas. Finalmente, el resultado no varió en los 99 minutos disputados. Reparto de puntos merecido para dos equipos que fueron ofensivos en busca de llevarse el gran botín, pero tuvieron que conformarse con puntuar.
