La Cultural y Deportiva Leonesa se guardaba una última muesca en este mercado estival. Cerca de la una de la madrugada, con la ventana de transferencias ya cerrada para futbolistas que provenían de club alguno, desde el Reino de León se confirmó la llegada de un último componente al equipo de Raúl Llona. Rubén Sobrino firma por una temporada por la ‘Cultu’ y tratará de sumar experiencia y pólvora a un plantel que necesitaba un perfil goleador, algo que si bien el veterano atacante no ha terminado de ser con claridad, puede valer como tal.
No en vano, a lo largo de su trayectoria, Sobrino ha sido capaz de hacer goles allá donde ha ido, ya fuera en la extinta Segunda División B, en la que debutó siendo prácticamente un adolescente mientras jugaba en la cantera del Real Madrid, en Primera, donde militó durante casi una década y a menudo salpimentó su tarjeta con tantos, o en LaLiga Hypermotion, en la que volverá a jugar por segunda campaña consecutiva, tras hacerlo la pasada en las filas del Cádiz CF, donde pasó los tres últimos años y medio y donde rescindió antes del cierre del mercado.
Último día de mercado y así estamos…#AúpaCultu pic.twitter.com/Np4IZp0qDu
— Cultural y Deportiva Leonesa (@CyDLeonesa) September 1, 2025
Sobrino y su recorrido en la élite
Esas nueve temporadas en LaLiga EA Sports hacen de Rubén Sobrino un fichaje contrastado, con más de 200 partidos disputados con equipos de Primera División y un puñado de goles en esta desde que hizo su debut con el Deportivo Alavés en 2016. Su buen hacer como babazorro le sirvió para jugar en el Valencia, donde pasó con más pena que gloria antes de firmar en enero de 2022 por el Cádiz CF, donde volvió a encontrar un volumen de intervenciones en goles nada desdeñable para un recién ascendido como es la Cultural Leonesa.
En Segunda División, el nuevo atacante culturalista suma más de un centenar de partidos; 39 de ellos, el año pasado, en el que consiguió anotar cuatro tantos en los más de 2.000 minutos de que dispuso como amarillo. Por lo tanto, pese a que el Cádiz optó por rescindir su contrato, y a pesar de sus 33 años, se trata de un jugador que viene con ritmo de competición, que puede dar la sensación de estar amortizado, pero que ha optado por continuar en la categoría tratando de mostrar que todavía tiene nivel para poder sumar dentro de ella.

La competencia de Sobrino
Aunque Sobrino ha jugado con frecuencia como extremo, y pese a que en el anuncio de la oficialidad de su fichaje la Cultural Leonesa no indica cuál es la posición que considera que tiene, lo cierto es que todo parece indicar que puede haber llegado al Reino de León para completar la terna de delanteros con Manu Justo y con Daniel Paraschiv, otro de los recién incorporados, si bien no cabe duda que la experiencia que atesora como futbolista exterior -aunque con tendencia a ir hacia adentro- sumará valor al plantel de Raúl Llona.
Con todo, la mencionada experiencia que tiene el atacante de Daimiel (Ciudad Real) le equipara con otros fichajes de la Cultural, conocedores de la dureza que tiene LaLiga Hypermotion, caso de Edgar Badia, que ha comenzado la competición como titular, o como Iván Calero, uno de los últimos firmados. Esta veteranía se contrapone a algún que otro jugador más joven y que hará su debut en Segunda División, caso de Selu Diallo o del extremo del Levante Paco Cortés, a quien la experiencia de Rubén Sobrino puede venir bien para acompañar su crecimiento en sus primeros pasos en el fútbol profesional.
 
			