El Almería no quiso dejar pasar la oportunidad de dar un golpe efectivo en el mercado de fichajes del verano de 2025. El elegido fue Thalys, brasileño procedente de Palmeiras y que, con apenas 20 años, promete ser una de las piezas clave del equipo almeriense en una temporada ambiciosa y en la que el objetivo no es otro que el ascenso. El equipo de Rubi hizo así un fichaje de Primera División, consiguiendo la firma del delantero por una cifra cercana a los 6M€.
La presentación del jugador, de hecho, fue un acontecimiento. Thalys lucirá el dorsal ‘9’ esta temporada y transmitió a la afición un mensaje claro de positivismo y creencia en el proyecto. Según el propio jugador, fue fácil elegir al club andaluz por la confianza mostrada por la dirección deportiva desde el primer contacto. En sus primeras palabras dejó ver su ambición y responsabilidad, consciente de que tendrá que cubrir el vacío que dejó el cafetero Luis Suárez, algo nada sencillo. Junto a él, contará con la ayuda de compatriotas como Lázaro Vinícius o Leo Baptistão, jugadores que, seguro, lo ayudarán en el proceso de adaptación a España y a la competición.
¿Quién es Thalys?
Thalys Henrique Gomes de Araújo nació en Sao Miguel do Campos, Brasil, en febrero de 2005. Zurdo, con buena planta (supera el 1.80 de altura) y una gran disposición para ocupar distintas zonas de ataque, el brasileño comenzó su andadura como futbolista en su Brasil natal, donde se formó en las categorías del Clube de Regatas, luciendo lo suficiente como para que un gigante como Palmeiras lo quisiera para su juvenil.
Si bien en el primer equipo brasileño apenas pudo mostrar dos tantos en sus 13 partidos con el ‘Verdão‘, su recorrido con el equipo Sub-20 deja 43 goles en apenas 79 partidos, con un gol para 134 minutos con el conjunto brasileño.

Desde el punto de vista táctico, Rubi tiene entre manos a un futbolista capaz de encajar de inmediato en el estilo ofensivo del equipo. Thalys puede actuar como delantero centro, mediapunta o incluso partir desde banda, generando superioridades gracias a su velocidad y su capacidad para fijar centrales. Su lectura de los desmarques y su facilidad para perfilarse ante el área lo convierten en una amenaza constante, un perfil que complementa a la perfección la idea de un Almería que busca verticalidad y contundencia en ataque.
Suma, por tanto, un activo ofensivo de primer nivel para una categoría en la que los detalles deciden partidos y en la que no es fácil encontrar una apuesta firme para el gol. Además de la finalización, Thalys puede ofrecer generación de espacios, capacidad de asociación y presión sobre la salida rival y, si su adaptación es tan rápida como parece prometer, el club almeriense habrá dado un paso decisivo para apuntalar una candidatura al ascenso que parece obligatoria por la inversión realizada.
Impacto económico y mediático de un Almería de Primera
En lo económico, el fichaje encierra un valor estratégico indudable. Tras la venta millonaria de Luis Suárez, el club rojiblanco reinvierte parte de esos ingresos en un talento que, además de rendir en el corto plazo, puede revalorizarse en el futuro. La planificación deportiva ha cerrado el mercado con 23 fichas, dejando margen para ajustes en invierno, pero asegurando un plantel competitivo que combina experiencia con juventud. Thalys, con su proyección, representa exactamente el tipo de operación que sitúa al Almería como trampolín de promesas internacionales.

El impacto mediático del fichaje ha sido inmediato y la prensa brasileña lo señala como una de las perlas de su generación. Incluso se le compara con delanteros como Endrick, también salido de Palmeiras, o Darwin Núñez, por la capacidad que se le intuye para irrumpir en Europa en ligas exigentes. Aunque la presión es evidente y marcará su camino, el propio jugador ha mostrado una madurez atípica, dejando claro que su prioridad es adaptarse al ritmo de la Segunda División española y aportar desde el primer día trabajo y resultados. Su carácter humilde y su predisposición al trabajo refuerzan ese optimismo en torno a su llegada.
Lo que parece es que Thalys es mucho más que un fichaje llamativo para generar titulares, pues es la confirmación más certera de un modelo que combina la ambición deportiva que marcan sus piezas y, sobre todo, una visión de negocio para crecer a nivel nacional e internacional. La convicción de que el joven brasileño puede marcar diferencias en el campo y, al mismo tiempo, convertirse en uno de los grandes nombres del mercado europeo en los próximos años es, sin duda, una realidad tras un fichaje que supera ampliamente a sus rivales en gasto y proyección. Una apuesta firme, de Primera División, que refuerza el presente de un Almería a otro nivel.
