Septiembre ha llegado y, con él, las nuevas novedades de Apple, el cual ha aparecido con su nuevo modelo de iPhone, el 17, acompañado no solo de innovaciones sino también de un aumento en el precio que ya ha hecho que el bolsillo de muchos de los fans de la marca de la manzana mordida se echen a temblar. Y es que el iPhone 17 cuesta más de 1.100 euros, mientras que las versiones más avanzadas rozan, ni más ni menos, que los 2.000 euros, algo que, si bien no nos sorprende, nos hace preguntarnos cuánto más van a subir los precios de sus móviles en Apple.
Este encarecimiento del iPhone responde a factores que la compañía no oculta, los cuales van desde la mejora de los componentes y nuevas funcionalidades, hasta la inflación global y el coste de los impuestos en España. Para los usuarios más fieles, estas cifras seguro que no son ningún impedimento, sino mas bien una inversión; aunque muchos otros ya se están comenzando a cuestionar la fidelidad con la que apoyan a esta marca.
Cómo los precios precios del iPhone han subido a lo largo de la última década
Si miramos la evolución del iPhone desde hace varios años, se observa un patrón constante, algo que se pudo comenzar a detectar cuando, en 2017, el iPhone X rompió la barrera de los 1.000 euros, una cifra que en aquel momento parecía un récord imposible de superar para la compañía. Desde entonces, cada lanzamiento ha aumentado progresivamente su precio, y es que el iPhone 12 partía de 909 euros, el iPhone 14 desde 1.009 euros, el iPhone 16 alcanzaba 1.099 y ahora el iPhone 17 se sitúa en 1.139 euros para el modelo base, es decir, el más básico.
Pero es que si nos vamos a las versiones más avanzadas, podemos llevarnos las manos a la cabeza, ya que el iPhone XS Max, en 2018, costaba 1.359 euros en su versión completa; mientras que hoy, el iPhone 17 Pro Max supera los 1.950 euros, lo que supone un incremento de cerca de 600 euros en apenas siete años.
¿Por qué Apple sigue subiendo tanto sus precios?
Es importante que tengamos en cuenta que, para responder a esta pregunta, no nos fijemos solo en la innovación que llevan a cabo desde Apple en sus dispositivos, sino que atendamos a una realidad más cercana, como lo son los impuestos de nuestro país. Y es que en España, el IVA y el canon digital hace que el precio de los iPhone y otros productos de esta conocida marca sean muy superiores que los que podríamos encontrar en Estados Unidos, donde el modelo base cuesta 999 dólares, lo que traducido a euros es poco más de 850.
Sin embargo, pese al encarecimiento, el iPhone mantiene una sólida posición en el mercado español, algo que se demuestra en que la cuota de ventas de Apple se mantiene cercana al 20%, lo que es una evidencia de la fidelidad que tienen sus usuarios a esta marca. Este fenómeno se explica porque el iPhone no es solo un teléfono, sino que representa un valor simbólico, un pasaporte al ecosistema Apple que incluye iPad, Apple Watch, AirPods y servicios digitales integrados, con actualizaciones garantizadas durante varios años.
Es por ello que, para muchos, comprarse un iPhone es más que adquirir un dispositivo, sino que supone es una decisión estratégica y emocional. La longevidad del terminal, la seguridad de las actualizaciones y la facilidad para integrar el móvil con otros productos Apple justifican, para sus seguidores, el gasto elevado, por lo que, en este sentido la subida del precio se percibe menos como un incremento y más como una inversión a largo plazo.
