Siempre que hablamos de ciberdelincuentes o ciberdelitos se nos viene a la mente un encapuchado con un ordenador lleno de números que quiere nuestros datos bancarios para robarnos o nuestros datos personales para hacerse pasar por nosotros, pero esta vez el objetivo es algo que no te podrías imaginar: los contadores de gas inteligentes. Y es que en los últimos meses se han detectado numerosos ataques dirigidos a manipular este tipo de aparatos para obtener información sensible de sus usuarios, sobre todo en Madrid.
Lo más preocupante de todo esto es que no busca robar dinero de manera directa, sino algo que se ha vuelto cada vez más preciado, que son los datos. Los delincuentes acceden a los contadores de gas para extraer referencias, identificadores o direcciones asociadas a los contratos, lo que después les permite realizar fraudes mucho más sofisticados, toda una evolución del cibercrimen que demuestra cómo la digitalización de los servicios, si no se protege adecuadamente, puede abrir la puerta a nuevos delitos que casi ni podríamos imaginarnos.
Cómo se manipulan los contadores de gas y qué buscan los ciberdelincuentes
La vulnerabilidad se ha detectado principalmente en contadores de gas inteligentes conectados a redes domésticas o sistemas corporativos con medidas de seguridad insuficientes. En septiembre, Madrileña Red de Gas notificó un ciberataque en el que quedaron expuestos algunos datos identificativos y de contacto de sus clientes, además de referencias técnicas vinculadas a los contadores de gas y, aunque no se vieron afectados los suministros ni el funcionamiento de los equipos, el incidente obligó a reforzar los protocolos y a alertar a las autoridades competentes.
Este tipo de ciberdelitos son especialmente peligrosos porque permiten construir perfiles detallados de los usuarios, ya que con los datos obtenidos de los contadores de gas, los atacantes pueden recrear comunicaciones falsas, como correos electrónicos o llamadas que simulan proceder de la compañía distribuidora. A partir de ahí, solicitan contraseñas, números de cuenta o incluso pagos falsos en nombre de una supuesta incidencia técnica.
La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) y el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ya han intervenido en la investigación, insistiendo en que los ciudadanos deben extremar las precauciones y desconfiar de cualquier contacto que no proceda de canales oficiales; a lo que se le suma que la compañía afectada ha implementado un sistema de doble autenticación para el acceso a la información de los contadores de gas, intentando cerrar las brechas que este ataque dejó al descubierto.
Los ciberdelitos evolucionan: la nueva era del fraude energético
Hasta hace poco, los ciberdelitos más habituales se centraban en suplantaciones bancarias o falsos envíos de paquetería, algo que ha cambiado completamente con la digitalización del sector energético de tal forma que los contadores de gas y de luz, al estar conectados a sistemas en red, son ahora un nuevo objetivo, ya que contienen datos personales, de consumo y localización.
Y es que los datos debe preocuparnos, ya que según ha revelado un informe de la Agencia de Ciberseguridad de la Unión Europea (ENISA), alrededor de un 20% de los incidentes que se registraron en España el pasado año 2024, afectaron de manera directa a infraestructuras relacionadas con la energía y el transporte, lo cual incluye a los contadores de gas inteligentes.
En este punto podemos pensar que esto no es tan “grave”, pero lo cierto es que los contadores de gas combinan nuestros propios datos con información pública, lo que puede suponer que recibir un ciberataque por uno de estos dispositivos se convierta en un delito a una escala mucho más grande. Para evitar esto, las autoridades recuerdan algunas de las pautas o consejos que debemos tener en cuenta frente a este tipo de delitos, como lo son no acceder a enlaces recibidos por correo o SMS, mantener nuestros dispositivos actualizados y contactar directamente con la compañía de gas ante cualquier duda.