Blanquivioletas
  • Primer equipo
  • Cantera
  • Fútbol provincial
  • Fútbol regional
  • Opinión
  • Actualidad
  • EN
Blanquivioletas
No Result
View All Result

Valladolid, Almada y Oviedo: el hambre y las ganas de comer

El Real Valladolid y el Real Oviedo comparten ya más que un lazo afectivo tras el dantesco episodio con Guillermo Almada

por Miguel Ruiz
15 de diciembre de 2025
en Opinión, Primer equipo
Almada Valladolid

Foto: Real Valladolid

Los otros ‘Almadas’ que conoció LaLiga Hypermotion

Mis 3 favoritos del Real Valladolid: Jornada 18

A Ignite le cojea la mesa

Desde el pasado domingo, todos los medios de comunicación y todos los periodistas deportivos de la ciudad ahondaban ya en un rumor que sonaba a certero: Guillermo Almada se va. Almada pone rumbo al Real Oviedo y ya parece un hecho. Con respecto a la voluntad de unos y de otros habrá mucho que hablar, pero lo que podría parecer un capricho de Almada, en realidad puede llegar a ser una oportunidad para calibrar mejor el tiro por parte del Valladolid.

Lo lógico, cuando pasan cosas como estas, es sorprenderse. No es común, por lo que se llega a entender ese sobresalto. Y lo hemos hecho. Ahora bien, el tema de Almada tiene un tufillo extraño a conveniencia para todas las partes implicadas en el conflicto. Y eso no quita la razón al club en nada ni se la da a Almada. Simplemente da la sensación de que todos salen contentos.

Almada
Guillermo Almada, contrariado durante el Albacete – Real Valladolid | Foto: LaLiga

Si algo llama la atención de esta situación final con Guillermo Almada saliendo del club de esta manera, es la firme convicción que había (o se trasladaba) desde todos los estamentos del club pucelano. Ni directiva ni jugadores habían nunca mostrado públicamente un ápice de duda con respecto a la capacidad de Almada en revertir la situación del club, más allá de la innegable necesidad de mejorar y potenciar esa puntería que siempre ha faltado, desde inicios de temporada.

Ha sido mucho el debe en la (cortísima) trayectoria de Almada en el Real Valladolid. Tanto que llega a parecer, también para el aficionado, una pérdida razonable, pero en verdad no deja de ser un paso en falso que obliga a comenzar de nuevo. Hoy, con razón, se acumulan las manos a la cabeza y los enfados entre todos los que pasaron frío el sábado ante el Andorra en la grada. Y la verdad es que lo suyo hubiera sido esperar algo más del club para reforzar ese posible salto por la borda o, incluso, la preparación para el día después, pero todo ha sido sorprendentemente rápido.

Almada Valladolid
Almada, en un entrenamiento | Foto: Pablo Marcos / Blanquivioletas

El cemento del proyecto armado este mismo verano ha roto, finalmente, por la figura de un Almada que no ha esperado siquiera a generar la duda de ser o no ser cesado, sino que ha querido asirse a una liana llegada desde uno de los equipos más hundidos de Primera División. El Real Oviedo, club amigo del Pucela, tendió su mano a un Almada que recibió, el pasado sábado en Zorrilla, la primera sentencia de un público que le pedía irse cuanto antes. Lo inesperado, sin duda, es que iba a obedecer.

La posible media verdad de la ofensa de Almada

Y es que la sensación que me llevo con todo esto es que todos salen ganando. El Real Valladolid por acelerar una situación que podría haber llegado en cualquier momento, quitándose de encima a un entrenador que empezaba a sembrar dudas y que, con la mirada atrás, apenas ha conseguido consensuar en el césped una idea que arraigue lo suficiente para colocar al Valladolid cerca de sus objetivos en la 25/26.

Con esa realidad presente, la llamada del Oviedo, más que una ofensa, podría considerarse un favor. Uno más, tras la salida de Kenedy a Pachuca, club vinculado directamente con los actuales dueños del club ovetense. La realidad, por tanto, refleja una creíble sensación de sosiego en el devenir de la marcha de Almada. Si bien es cierto que sorprende, por no ser común que un equipo en franca decadencia de resultados consiga cautivar a un entrenador a mitad de temporada en nuestro fútbol, la marcha de Almada parece que encajaba a ambas entidades.

Almada Orta Valladolid
Almada, el día de su presentación con el Real Valladolid | Foto: Blanquivioletas

Y, a la vez, el contrato de Almada es de sobra conocido como una de las razones que ha permitido al charrúa tomar esta decisión. Lo que hace meses fue Ecuador y su interés por tenerlo como seleccionador, hoy han sido Oviedo y Grupo Pachuca. Pocas razones más podría tener Almada para entender que las cláusulas de su contrato, citadas en numerosas ocasiones cada vez que Uruguay o Ecuador soltaban algún globo sonda, hacían que el recorrido de Almada en Valladolid no iba, precisamente, para largo.

Si bien es cierto que el Valladolid no pretendería, a día de hoy, deshacerse del charrúa, enero podía ser un claro punto de no retorno si los resultados no cambiaban. Con el breve parón navideño por delante y solo un partido fuera de casa en el horizonte, seguramente no sea el peor momento para entender que, quien no quiera estar, es mejor que se vaya.

  • Aviso legal
  • Política de cookies
  • Contacto

© 2025 Blanquivioletas

No Result
View All Result
  • Primer equipo
  • Cantera
  • Fútbol provincial
  • Fútbol regional
  • Opinión
  • Actualidad
  • EN

© 2025 Blanquivioletas